El pasado 30 de agosto el Dr. Adolfo Roitman, antropólogo e historiador nacido en Buenos Aires, Argentina, presentó su libro Del Tabernáculo al Templo en el salón Columnas de la Comunidad Bet El.

ENLACE JUDÍO MÉXICO -El Dr. Roitman tiene una maestría en Religiones Comparadas y un título en Pensamiento Judío Antiguo por la Universidad Hebrea de Jerusalem. En 1986 se graduó como rabino en el Seminario Rabínico Latinoamericano. Actualmente es director y curador del Santuario del Libro en el Museo de Israel, en Jerusalem y profesor titular en el Instituto Schechter de Estudios Judíos.

Dalia Mizrahi Goldsmith, encargada de presentar al Dr. Roitman, comentó: “No es casualidad que la presentación del libro del Dr. Roitman sea en la sinagoga. El libro de Adolfo nos explica los orígenes de la misma desde una perspectiva crítica, académica, y honesta, guiando al lector a través de la lectura bíblica, así como escritos intertestamentarios, apócrifos y citas del canon cristiano, libros que, si no conociéramos al Dr. Roitman, no sabríamos que existen. El Dr. Roitman no titubea al citar polémicas anti-templo y severas críticas hacia la casta, no tiene miedo de citar libros que nos causan conflicto, que nos ponen nerviosos, que nos hagan dudar de todo lo que nos enseñaron en el colegio; al contrario, creo que le da gusto ponernos nerviosos. La casta sacerdotal es y fue percibida como pureza-  pero en algunos de los textos que cita el Dr. Roitman, los sacerdotes son retratados como seres corruptos. Del mismo modo, algunos de los libros alaban la pureza del templo, su importancia, no solo a nivel sociológico, religioso, político-económico, sino incluso a nivel cósmico”.

Para Adolfo Roitman, “la destrucción del Templo comienza con la narrativa bíblica del mítico Tabernáculo; honestamente, creo que la tradición bíblica esconde ecos de algo que pudo haber sucedido en la historia y es muy difícil de rastrear”.

Roitman explica que es a partir de la época romana podemos hablar de un templo real:  “Comienza con la figura de Herodes el Grande, que fue nombrado por el senado romano Rey de Judea en el año 40 aEC. Se considera a Herodes como un rey cruel, aparte de un gran estadista y el más grande constructor de la tierra de Israel después de Salomón. De las grandes obras de Herodes se conoce Cesáreo o Masada, el Palacio de Invierno de Herodes, que comenzó siendo una fortaleza de los Macabeos, y era uno de sus quince palacios”.

Sin embargo, no hay ninguna duda que la gran obra de Herodes es la ciudad de Jerusalem que había comenzado a desarrollarse con un proceso de urbanización en la época de los Macabeos.

El Templo ha ocupado el imaginario colectivo durante siglos: “Por ejemplo, en un rollo llamado El Documento de Damasco, la Comunidad del Mar Muerto, de Qumram, plantea la forma de entrar de Satán; habla de la manera en que Satán engaña a Israel, contaminando el templo, haciéndole creer al pueblo que el templo es puro cuando ya lo volvió impuro. Por esta razón esta comunidad, que venía de círculos sacerdotales, deja Israel”.

Si quieres saber más acerca de este apasionante tema, no dejes de ver la conferencia completa en nuestro video.