Los militares estadounidenses contrataron los servicios de una empresa británica que desde Bagdad fabricaba y modificaba material audiovisual para influir en la opinión pública en Oriente Medio.
AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO
Una investigación conjunta realizada por The Sunday Times y la ONG The Bureau of Investigative Journalism, ha revelado que una empresa británica especializada en relaciones públicas, producción de video y limpieza de imagen, fue contratada por el Departamento de Defensa de Estados Unidos para producir videos falsos de acciones terroristas.
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Según los sitios RT y The Daily Beast, se corroboraron transacciones por hasta 540 millones de dólares entre el Pentágono y esta empresa, llamada Bell Pottinger.
De acuerdo con Martin Wells, quien trabajó para la compañía, alrededor de 2004 fue contratado y se le instruyó instalarse en Bagdad, donde producían el material resguardándose en un edificio altamente protegido, conocido como Camp Victory.
El objetivo era claro, en primer lugar, realizaban videos propagandísticos que generaban una imagen negativa de Al Qaeda; su segunda tarea era crear noticias falsas pero que hicieran pasarse por fragmentos informativos de un canal de televisión árabe; finalmente, el tercer encargo consistía en falsificar videos de propaganda de Al Qaeda.
Estos videos, según RT, se distribuían “en discos compactos en Oriente Medio y permitían a la CIA buscar a presuntos simpatizantes de la red terrorista, puesto que contenían un código escondido que permitía identificar las direcciones IP de los ordenadores personales en los cuales los veían”.
Fuente:elsiglodetorreon.com.mx
