El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu pidió hoy a su gabinete abstenerse de todo comentario sobre el virtual presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, luego de que algunos ministros consideraron que su triunfo afectará a Israel.

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En su habitual reunión semanal con su Consejo de Ministros, Netanyahu dijo que hasta que se instale de manera oficial la nueva administración de Estados Unidos, nadie debe hablar o dar entrevistas sobre la futura presidencia estadounidense y del añejo conflicto con los palestinos.

“Solicito que todos los ministros, viceministros y legisladores permitan a la administración entrante formular, junto con nosotros, su política sobre Israel y la región, a través de los canales aceptados y tranquilos y no a través de entrevistas y declaraciones”, afirmó.

Pese a que Netanyahu fue uno de lo primeros líderes del mundo en hablar sobre la victoria electoral de Trump, ha sido cauteloso en sus comentarios sobre la asombrosa victoria del republicano en las elecciones del martes pasado.

Sin embargo, otros políticos israelíes han utilizado el triunfo de Trump en Estados Unidos para promover su causa y algunos, como el ministro de Educación, Naftali Bennett, afirmar que con la nueva administración se acaba la idea de una solución de dos Estados con los palestinos.

“Tras el triunfo, el presidente electo y yo decidimos reunirnos pronto para discutir todas las cuestiones importantes en la agenda entre Estados Unidos e Israel”, reveló el jefe de gobierno, según un reporte de la edición electrónica del diario The Times Israel.

En los últimos años, con prudencia y con responsabilidad logramos nuestras relaciones con Estados Unidos -la mayor y más importante de nuestros aliados, y seguiremos haciéndolo en los próximos meses y años, indicó Netanyahu a su gabinete.

El primer ministro de Israel también dijo que Trump había “expresado una muy profunda amistad para Israel, una amistad que ha caracterizado a él y se debe agregar también el equipo alrededor de él, por muchos años”, apuntó.

Algunos analistas internacionales consideran que es muy probable que el triunfo de Trump conducirá a una política mucho más favorable de Estados Unidos hacia Israel, aunque muchos otros han advertido que es “impredecible”, dados los pensamiento “confusos” del republicano.

Fuente:portalpolitico.tv