GIULIO MEOTTI / ¿Qué inspiró a Al Qaeda a atacar a Estados Unidos, según uno de los terroristas, Khalid Sheikh Mohammed (KSM), que ayudó a planear el 11-S?

SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – El psicólogo estadounidense, James E. Mitchell, quien elaboró el programa de interrogatorio que ayudó a detener los ataques terroristas y salvó innumerables vidas después del 11 de septiembre, acaba de publicar un libro, Enhanced Interrogation.

Comentando el libro de Mitchell, Marc Thiessen escribió en el Washington Post:

“… KSM dijo que Al Qaeda esperaba que Estados Unidos respondiera al 11 de septiembre como en el ataque de los cuarteles de la Marina en Beirut en 1983, cuando KSM le dijo a Mitchell que Estados Unidos giró la cola y salió corriendo”.

Al final, KSM le dijo a Mitchell:

“Ganaremos porque los estadounidenses no se dan cuenta … no necesitamos derrotarlos militarmente, solo tenemos que luchar lo suficiente para que ustedes se vean derrotados y abandonen … Eventualmente, Estados Unidos nos pondrá su cuello al descubierto para que nosotros lo sacrifiquemos”.

Caricaturas de Charlie Hebdo

Esa es la razón por la que los islamistas están tratando de golpear el bajo vientre de Occidente: la oficina de la revista, Charlie Hebdo, restaurantes y teatros en París, un café en Copenhague, un paseo marítimo en Niza, una iglesia en Normandía y un mercado de Navidad en Berlín. Los islamistas comprenden perfectamente que el flanco más expuesto de Occidente es su frente interno. El mismo estilo de vida que defendemos con palabras es el principal obstáculo a la iniciativa de la defensa contra los islamistas. Los islamistas nos han dicho en todos los sentidos: “amamos más la muerte que la vida”, mientras que en Occidente amamos la expectativa de vida más que la vida misma.

Como señaló Mark Steyn en 2004, “quienquiera que haga las cintas de audio de Osama bin Laden en estos días mostró una astuta comprensión de la situación al ofrecer una “tregua” a cualquier nación europea que se aleje de Estados Unidos”. En otras palabras, se rinda. A través de ataques terroristas, muchos yihadistas ya están demostrando ser capaces de decidir el destino de muchos gobiernos.

Compare lo que sucedió en dos países diferentes después de los ataques del 11-S.

Noviembre de 2001: Dos meses después de los ataques terroristas en Nueva York, Pensilvania y Washington, Estados Unidos derrocó a los talibanes en Afganistán.

Marzo 2004: Un mes después de los atentados terroristas de Madrid, el pueblo español derrocó a su gobierno conservador, eligió a un socialista y abandonó la coalición militar occidental en Irak. Pocos días después de asumir el cargo, el gobierno socialista de Zapatero retiró a las 1.300 tropas españolas que fueron desplegadas a Irak por el anterior gobierno conservador de José María Aznar. Como explicó James Phillips en la Heritage Foundation:

“Este retiro español será percibido como un gran triunfo político para Al Qaeda y los radicales islámicos afines, probablemente su logro más importante desde el 11 de septiembre de 2001”.

Según Soeren Kern:

“Confirmando la creciente sospecha de que el enfoque posmoderno de Zapatero en la lucha contra el terrorismo carece de base en la realidad, dijo a TIME Magazine en septiembre de 2004 que ‘la igualdad de sexos es mucho más eficaz contra el terrorismo que la fuerza militar’. Al mismo tiempo, anunció una iniciativa mal definida que él llama “Alianza de Civilizaciones”, que toma prestado fuertemente del concepto de ‘Diálogo de Civilizaciones’ promovido por radicales islámicos en Irán durante los años 90. En su esencia, la iniciativa pide a Occidente negociar una tregua con terroristas islámicos, y en los términos establecidos por este último”.

El resultado español fue entendido en los círculos de al-Qaeda como una victoria monumental, y llevó a las redes de los islamistas a invertir en la búsqueda de influir en el resultado de las elecciones en otras partes de Occidente.

El departamento de relaciones públicas de Al Qaeda e ISIS han aprendido a hablar en un idioma que Occidente puede entender.

Manifestación en Madrid contra Zapatero después del atentado islamista

Después de España, los yihadistas han podido determinar el destino de otras elecciones, en Francia: el presidente François Hollande, de hecho, acaba de anunciar que no se presentará a la reelección en 2017. Su presidencia fue mortalmente derrotada por una campaña de múltiples ataques terroristas que desmoralizaron al gobierno de Hollande y destruyeron su credibilidad política. Los secuaces de ISIS mataron a 90 personas en el Teatro Bataclan de París. ¿Qué hizo el gobierno francés para vengarlos y para destruir a los islamistas responsables de esa carnicería? Absolutamente nada – o Raqqa habría sido polvo.

En diciembre de 2016, un nuevo ataque terrorista islámico puede haber ordenado el futuro de otro líder político europeo: Angela Merkel. Pero más allá de las posibilidades electorales de Merkel, la yihad ya había destinado el curso de la nación más importante de Europa cuando su canciller, después de que 12 personas fueran asesinadas en un mercado de Navidad en Berlín, dijo que Alemania “es más fuerte que el terrorismo”. Merkel se negó, sin embargo, a mostrar cómo los alemanes son más fuertes que los islamistas, cambiando su política sobre migración y multiculturalismo. El día después de que un islamista mató a occidentales en un mercado de Navidad en Berlín, ningún vuelo militar alemán despegó para bombardear ISIS.

“Muchos occidentales han aceptado la normalidad de los más sórdidos ataques”, dijo el filósofo canadiense Mathieu Bock-Côté. “Hemos interiorizado la presencia en nuestras vidas de la violencia islamista, no sabemos qué significaría esta guerra contra el Islam radical”.

El destino de otro país europeo, Dinamarca, fue decidido por los islamistas en 2005, cuando el apaciguamiento y la impotencia daneses dominaron la crisis del humor gráfico.

Más allá del mapa electoral, la yihad ya está cambiando la cara del bajo vientre de Europa de diferentes maneras: la libertad de expresión está retrocediendo en todas partes de Berlín a Amsterdam, los velos islámicos están proliferando, los tribunales de la sharia funcionan a toda velocidad en muchas capitales de la UE y las comunidades judías están huyendo. Los reformadores musulmanes son silenciados, la asimilación de los musulmanes está fracasando, y la intelligentsia occidental ya está firmando cartas de capitulación. Las más recientes han sido la resolución fraudulenta en la ONU y la UNESCO declarando los lugares sagrados judíos e incluso la Ciudad Vieja de Jerusalem – el corazón del judaísmo durante casi 4.000 años y sede del cristianismo durante 2000 años – islámicos, a pesar de que el Islam ni siquiera existió históricamente hasta el siglo VII, cientos de años después.

La próxima “conferencia de paz” en París, el 15 de enero, es donde 70 naciones probablemente acordarán otra votación del Consejo de Seguridad de la ONU para establecer un Estado palestino, presumiblemente (según la Resolución 2334 del CSNU) con la Ciudad Vieja de Jerusalem, el corazón del pueblo judío y sagrada para el pueblo cristiano, como su capital. Es otra señal terrible de la suave capitulación de Occidente ante el terror. También es una reminiscencia de otra “conferencia de paz”, en 1938, cuando en Munich las democracias occidentales se inclinaron ante Hitler y el estado checoslovaco fue mutilado y privado de fronteras defendibles. Seis meses después, abandonada por sus aliados franceses y británicos, y acosada por los nazis, Checoslovaquia fue invadida por Alemania. Al igual que Israel hoy en día, los checos en la década de 1930 fueron acusados de ser “perturbadores de la paz”. “Paz”, como en las inversiones de George Orwell, a veces significa capitulación al Islam.

Fuente: Gatestone Institute – Traducción: Silvia Schnessel – © EnlaceJudíoMéxico