Con el entusiasmo y la energía de sus líderes jóvenes en el exterior, el Departamento para América Latina del KKL en Israel celebró su primera Conferencia Latinoamericana de Liderazgo Juvenil durante nueve días, desde el 27 de diciembre al 4 de enero.

El encuentro reunió a voluntarios y profesionales jóvenes de siete países, les presentó el amplio alcance de los proyectos del KKL en Israel y les proporcionó también una plataforma para sugerir propuestas e intercambiar ideas e información.

Los participantes llegaron de México, Argentina, Uruguay, Chile, Brasil, Ecuador y Cuba. Los mexicanos son:

Yonathan Salomón Fleitman Levin
Fredel Kajomovitz Romano
Tamara Gabriela Richter London
Nesim Shasho Jasqui
Michelle Burak Reifer
Debby Luna Amiga Sitt
Zajac Hadid Margalit
Cynthia Schejtman Deutsch
Paulina Kababie

La conferencia incluyó reuniones con líderes del KKL y autoridades regionales, empresarios y académicos, así como nueve días completos de gira para tomar conocimiento con una amplia gama de proyectos del KKL en todo el país, que van desde el Parque del Lago Hula y el Bosque Biria con su Sendero de los Justos (Shvil HaTzadikim) en el norte de Israel, hasta el Parque Ariel Sharon en el centro del país y la Estación de Investigación y Desarrollo Yair en la Aravá en el sur.

“El liderazgo joven profesional y voluntario en América Latina es un recurso inexplorado y deseoso de contribuir con la labor del KKL; son enérgicos, entusiastas y creativos, llenos de ideas frescas para proyectos singulares y colaborativos. En el Departamento para América Latina aspiramos a aprovechar toda esa energía juvenil en un solo lugar, a través de esta Conferencia de Liderazgo Juvenil, la primera de su tipo”, dijo Ariel Goldgewicht, director para América Latina.

El 2 de enero, los jóvenes líderes visitaron el Monumento de la Flecha Negra cerca de la frontera con Gaza, donde gozaron de una visión de primera mano de la proximidad de Gaza a dicha región y la complejidad del conflicto en la zona, a algunos cientos de metros de la frontera.

A la distancia pudieron ver a un agricultor israelí que trabajaba pacíficamente sus campos verdes con un tractor. Demián Krzymuski, del Departamento para América Latina, que acompañó al grupo, señaló que toda la zona fronteriza había sido un campo de batalla con soldados y tanques estacionados allí.

“El KKL jugó un papel muy importante también después del conflicto, en la rehabilitación de la tierra para que pudiera ser utilizada de nuevo para cultivos agrícolas”, agregó Demián.

“El KKL está en todas partes y eso es lo que vine a ver: la extensión y la profundidad de los proyectos concretos en los que está involucrado”, dijo Federico Kremenchuzky, de Argentina. “El KKL no se ocupa sólo de plantar árboles sino que realmente participa en el desarrollo del país. Ahora tendré mucho más que hacer y mucha gente con la que encontrarme, y podré mostrarles y contarles acerca de muchos más proyectos en los que el KKL está activo”

En la comunidad Naveh , en el Néguev occidental, el grupo aprendió sobre el espíritu pionero todavía vivo en Israel. Naveh, en las arenas de Halutza, es una de las tres nuevas comunidades fundadas para los evacuados de Gush Katif. Se encuentra a unos cinco kilómetros de la Franja de Gaza y a dos kilómetros al este de la frontera con Egipto, en una zona que era una ruta para el contrabando de armas y tráfico de drogas y de personas.

El KKL ha desempeñado un papel central en la creación de estas poblaciones y fue responsable de la ejecución de las obras de tierra para la construcción de viviendas, edificios públicos, viviendas temporarias y campos agrícolas.

Aharon Tzohar, rabino de los estudiantes de segundo año del curso premilitar de la comunidad (mejina) se reunió con el grupo y les dijo que hoy en día, sólo el 20 por ciento de las 300 familias de Naveh provienen de Atzmona en Gush Katif, “Si hubieran venido aquí hace ocho o nueve años, todo lo que habrían visto era arena”, dijo.

“Hasta hace ocho años, nadie había vivido aquí, nunca. Lo que ven aquí es realmente un milagro. Sin la cooperación de KKL desde que este lugar fue fundado, no podríamos vivir este pionerismo moderno. No se trata sólo de jardines, sino de la infraestructura”.

“Somos malos para ISIS y Hamás; pero ahora, cuando nos ven, entienden que toda la nación israelí está detrás de nosotros. Ven al KKL de Argentina, Uruguay, y entienden que todos estamos interconectados. Naveh es el sionismo de hoy y todos somos parte de este milagro”.