En este siglo XXI la yentele o casamentera ha tomado formas diferentes. Desde la tradicional bobe o Idishe mame que no se cansa de hacer y hacer Shidajs, hasta sitios de internet supercomplejos, con algoritmos impensables de compatibilidad amorosa. Lo que sí es un hecho es que salir con alguien (desde que lo puedes stalkear en Facebook antes de decidir si te late o no) se ha vuelto completamente diferente a las dates que tenían nuestros papás,  y ni hablar de nuestros abuelos.

LA MEIDELE

Por lo anterior es que surgen plataformas como Speed Dating y como varias cosas que son a la vez excelente y pésima idea, un grupo de paisanos fueron quienes inventaron esta dinámica. Esta nueva forma de conocer gente consiste en un grupo de gente soltera que se reúne en un espacio y poco a poco va sentándose frente a parejas potenciales para platicar por un periodo de tiempo determinado, y cuando menos te lo esperas y más candente se torna la conversación… ¡Pum! Toca cambio de parejas y es empezar otra vez desde cero con alguien más.

Las ventajas del Speed Dating es que si te toca platicar con alguien que nada que ver, no tienes que poner un pretexto estúpido como que tuviste una emergencia familiar para salir corriendo de la cita; simplemente sigues con la siguiente persona. Pero las desventajas (y la gente que ha estado en este tipo de citas no me dejará mentir) es que puede ser un poco frustrante salir con aproximadamente 10 personas en un mismo día. O sea, puedes tener 15 malas citas en lugar de solo una. Pero ¡Ojo! eso no quiere decir que no puedas conocer así al amor de tu vida.

Así que para mal o para bien el Speed Dating fue una creación de nada más y nada menos que paisanos de Beverly Hills en un gran lugar llamado Peet´s Coffee &Tea. El culpable: El Rabino Yaacov Deyo, en1998. Este rabino pertenece, por supuesto, a Aish Hatorah de Los Ángeles. Al rabino Deyo y a sus fieles seguidores se les ocurrió la gran idea de modernizar las citas paisanas; al estilo reality show. Así es como se les ocurrió este sistema de una noche alborotada en donde varios paisanos solteros tenían más de 10 citas en un mismo lugar. El objetivo: conocer a tantos paisanos del sexo opuesto como sea posible. Un año después el Speed Dating se convirtió en un fenómeno mundial fuera de la comunidad judía.

Así que, queridos lectores, como los bagels, la palabra shmuck y las latkes, los paisanos contribuimos una vez más a la cultura pop norteamericana.

A continuación las escenas de Speed Dating de la T.V. favoritas de la Meidele: