Con motivo de la Semana del Libro en Israel, visitamos la biblioteca arqueológica del gran Museo Rockefeller en Jerusalén.

P HUERGO CASO / ENLACE JUDÍO:

No sólo es la más grande de todo el Oriente Medio -120.000 volúmenes, prácticametne todo lo editado sobre arqueología medioriental – sino que, además, para los arqueólogos de todo el mundo , es una de las más importantes. Para Israel, desde luego, la más importante, porque es la biblioteca de la Autoridad de Antigüedades de Israel y porque está ubicada en el Museo Rockefeller,  Jerusalén, que es el museo más antiguo de Israel.

A principios del S. XX, Boris Shatz -el padre de la Academia de Bellas Artes “Betzalel”- recibió una noticia de la Agencia Judía: habían encontrado la ubicación de su Academia comprando la casa de quien en el S XVIII fuera el mufti de Jerusalén, no lejos de la Puerta de Damasco. Pero el proyecto no se llevó a cabo y  la Academia se abrió en el edificio que hoy es La Casa de Los Artistas. Cuando el Imperio Británico, en detrimento del Imperio Otomano, pasó a ser quien regiera los destinos políticos de Eretz Israel decidieron usar el edificio para montar un museo de arqueología , lo cual era inaudito: hasta entonces las reliquias se las llevaban a Londres….Al museo le dieron el nombre de la persona que lo pagó: John D. Rockefeller. Dos millones de dólares de la época.

Aparte del fondo museístico, de gran relevancia por sí mismo, donde las piedras y artefactos varios nos dejan  leer la Historia de Oriente Medio ,  el museo dispone de una biblioteca,  constituida en 1935 con libros procedentes de la librería de la Escuela Británica de Arqueología y del Departamento de Antigüedades del Mandato Británico.

Aunque la biblioteca está totalmente digitalizada con las últimas innovaciones informáticas, se ha guardado el encantador aspecto antiguo de las antiguas bibliotecas, y el visitante -está abierto a todo el público y realizan exposiciones- puede contemplar los métodos de los antiguos ficheros de tarjetas y demás antigüallas del mundo de la biblioteconomía.

Uno de los libros que más suele gustar ver al visitante no iniciado es La Descripción de Egipto, que sorprende por su tamaño -y por su importancia intrínseca. Se trata de un recopilatorio de notas y dibujos de los arqueoólogos franceses que acompañaron a Napoléon en su campaña egipcia en 1798.

También suelen gustar mucho los mapas -hay uno de Jerusalén , de Olef Dapper, que representa la Jerusalén del S XVII- Forma parte de un libro que se publicço en Holanda en 1677 en las imprentas de los editores sefardíes de Amsterdam.

Aunque de todas las obras populares, la más vista y admirada y comentada es la colección de David Roberts, artista que a finales del S XIX realizó una serie de bocetos, litografías y acuarelas  bajo el título Tierra Santa y de cuya memoria nos ocupamos hace poco en Enlace Judío redactando una nota donde se pueden contemplar su obra:

Jerusalén según David Roberts. https://www.enlacejudio.com/2017/05/24/jerusalen-segun-david-roberts/

Desde el año anterior, la Biblioteca realiza sus propias exposiciones. En la foto podemos ver , por ejemplo, un busto del gran filósofo griego Epicuro, encontrado en el año de 1935 en la localidad de Sebastie. Se considera sea copia de un original romano.

Pero como no podía ser de otra forma, también aquí hay espacio para la polémica. Por un lado, la Autoridad Palestina reclama ser la regidora legal del museo en sí e incluso pide que los Manuscritos del Mar Muerto, que antes de estar en el Santuario del Libro se guardaban aquí, sean devueltos al Rockefeller. Tanto el Santuario del Libro, dentro de Museo de Israel, como el mismo museo Rockefeller en sí, dependen del Museo de Israel.

Por otro lado, la AAI -la Autroridad de Antigüedades de Israel- ha estado traspasando algunos artefactos y libros a sus oficinas en Jerusalén Oeste. El año pasado, la asociación  isarelí Emek Shavé llevó al tribunal Supremo de Justicia una demanda de resolución para que ninguno de los fondos del Rockefeller pueda ser traspasado. El veredicto aún no se ha emitido.

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