Enlace Judío México.- Después de la encarcelación de un diputado, miles de turcos convocados por la oposición, iniciaron una gran marcha para pedir la liberación de numerosos políticos y periodistas.

Enis Berberoglu, del Partido Republicano del Pueblo (CHP, socialdemócrata), fue condenado el miércoles a 25 años de prisión por haber filtrado informaciones confidenciales al periódico de la oposición Cumhuriyet.

Esta es la primera vez que un diputado del CHP, partido fundado por el padre de la Turquía moderna, Mustafá Kemal Ataturk, es encarcelado desde que el año pasado se levantó la inmunidad parlamentaria.

Berberoglu fue declarado culpable de haber proporcionado a Cumhuriyet un video con las imágenes de unos presuntos camiones de los servicios secretos turcos (MIT) en la frontera siria en enero de 2014 que -según el periódico- transportaban armas a Siria.

El líder de CHP, Kemal Kılıcdaroglu, a la cabeza de esta gran movilización, se refirió al arresto de Berberoglu como “ilegal” y lo consideró “políticamente motivado” por el palacio presidencial, al referirse al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.

“Nuestra marcha continuará hasta la implementación de justicia en este país (…) Vivimos una situación en la que los criminales no son juzgados y, sin embargo, los inocentes son juzgados y encarcelados”, ha indicado Kılıcdaroglu a los periodistas antes de iniciar el recorrido.

El líder opositor enfatizó el carácter pacífico de la marcha. “No queremos choques ni enfrentamientos. Respetamos todas las visiones políticas. Pero en un país en que no hay justicia, no habrá paz. Nos enfrentamos a una dictadura y nosotros no queremos ni dictaduras [civiles] ni golpes (militares). No queremos periodistas en la cárcel. Por ello comienzo esta marcha”, recalcó.

Por su parte, Nuran, un maestro jubilado que se negó a decir su apellido, comentó “Erdogan está agitando su mano hacia cualquier persona que esté en su contra (…) La detención se realizó para enviar un mensaje pero nosotros no tenemos miedo. Resistiremos hasta que nos metan a todos en la cárcel”.

La Policía turca, según los medios locales, estableció fuertes medidas de seguridad en torno al inicio de la protesta y la delegación provincial del Gobierno ha afirmado que restringirá el número de manifestantes en las calles de Ankara para evitar problemas de tráfico y que sólo quienes vayan convenientemente equipados con bandas y chalecos reflectantes podrán participar en la marcha en las carreteras fuera de la urbe.

Actualmente, 167 trabajadores de los medios de comunicación se encuentran entre rejas en Turquía, así como más de una decena de diputados, incluidos los líderes del prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Selahattin Demirtas y Figen Yüksekdag.

Durante la jornada se produjeron algunos enfrentamientos con opositores al CHP, pero los disturbios no pasaron a mayores.

“Hemos venido por la justicia” declaró a la AFP Funda Sakalioglu, una manifestante, que calificó la marcha como una “advertencia”. “Estamos frente a la dictadura.”

“Actualmente en Turquía, (…) las decisiones judiciales vienen de arriba”, se lamentó Aylin Nazliaka, diputada independiente. “Estamos en la calle para protestar contra esto”.

Varias manifestaciones de apoyo fueron organizadas en algunas ciudades del país, según medios locales. En Estambul, centenares de personas se congregaron al grito de “ganaremos con la resistencia”.

Tras el fallido golpe de Estado del pasado 15 de julio, el gobierno turco lanzó unas purgas sin precedentes, dicho golpe fue atribuido a Fethullah Gülen, un predicador exiliado en Estados Unidos acusado de haber infiltrado las instituciones turcas con ayuda de una extensa red de fieles.

 

 

Con información de:swissinfo.ch