El jefe del panel parlamentario ruso dice que Israel debe usar su influencia para que los grupos de oposición depongan las armas.

HERB KEINON

Rusia quiere aumentar la cooperación con Israel en relación con Siria, y desea que Jerusalem utilice cualquier influencia que tenga para que los grupos de oposición allí depongan las armas y entablen negociaciones, dijo a The Jerusalem Post Konstantin Kosachev, un alto parlamentario ruso.

Kosachev, que preside el Comité de Asuntos Exteriores del Consejo de la Federación, la cámara alta del parlamento ruso, estuvo en el país el martes y el miércoles con Viktor Ozerov, presidente del Comité de Defensa y Seguridad del Consejo de la Federación, para mantener reuniones con el Comité de Asuntos Exteriores y de Defensa de la Knesset.

En una entrevista de la noche del martes en su hotel en Jerusalem, Kosachev dijo que la intervención y acciones de Rusia en Siria sirven los intereses de otros países de la región, incluyendo a Israel.

“Si se produjera un cambio de régimen violento en Siria, estamos seguros de que el nuevo régimen no será democrático en absoluto, sino alguien como el líder del Estado islámico Abu Bakr al-Baghdadi, y que ciertamente tendrá una influencia negativa en todos los vecinos de Siria”, dijo.

Cuando se le preguntó si Israel -que al parecer ha bombardeado depósitos de armas o convoyes en Siria en el camino a Hezbolá- está actuando en contra de los intereses de Rusia en el país, Kosachev dijo: “No diría eso, pero me gustaría una cooperación más estrecha”.

Dijo que le gustaría ver más cooperación en las esferas de “intercambio de información”, en relación con lo que está sucediendo en Siria: las organizaciones que actúan allí y los grupos con los que es posible – e imposible – negociar. Kosachev dijo que le gustaría ver este tipo de cooperación con EE.UU. también.

Además, dijo que “no es ningún secreto” que Israel tiene contactos con grupos de oposición moderados de Siria, y tal vez podría ayudar a convencerlos de que depongan las armas y se unan a las negociaciones basadas en las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. Dijo que hablaba de esto en su calidad de político y no como “operativo de inteligencia”.

En cuanto a las líneas de fuego que Israel ha establecido en Siria – que no se transfiera armas de cambio de juego a Hezbolá, ni se establezca ninguna presencia iraní permanente – Kosachev dijo que mientras entiende las preocupaciones de Israel y reconoce que tiene derecho a defenderse, no puede aceptar que tenga derecho de “interferir o ser el regulador de las relaciones entre los países”.

Respecto a la demanda de Israel de impedir que Irán establezca una presencia permanente en Siria, dijo que Israel está hablando de las relaciones entre dos estados miembros de la ONU, “y por lo tanto no puedo aceptar que Israel diga que esto “no es aceptable”. “Acepto que digan ‘estamos muy preocupados, y hay que hacer algo al respecto'”. A la pregunta si Rusia puede impedir una presencia iraní en las fronteras de Israel, respondió: “No interferimos en las relaciones bilaterales entre los países”. Kosachev dijo que la situación en Siria sería mucho mejor si todas las naciones involucradas en el conflicto acataran el derecho internacional.

“Hoy, Rusia es el país que actúa de acuerdo con el derecho internacional, y está allí por invitación del gobierno legítimo”, dijo. “Rusia está trabajando con otros países de la región para lograr un alto el fuego para calmar la situación, y los países con los que estamos trabajando son Irán y Turquía, con el acuerdo de Siria, de acuerdo con las normas internacionales”.

Kosachev negó que Rusia estuviera en Siria para preservar el régimen del presidente Bashar Assad.

“No tenemos derecho a decir cuál será el gobierno en Siria, y nadie más que el pueblo sirio puede hacerlo”, dijo. “Estamos seguros de que la injerencia externa en Siria puede causar mayor inestabilidad en esa región y llevar a situaciones similares a las que existen en Irak y Libia, algo que sin duda fortalecerá a las organizaciones terroristas internacionales”.

Kosachev dijo que Rusia estaba dispuesta a cooperar con cualquier estado para luchar contra los terroristas en Siria y resolver el conflicto, “con la condición de que tratemos precisamente estas cuestiones, y no un cambio de régimen”.

Rechazó la calificación de los recientes acontecimientos en Siria -el derribo estadounidense de un avión sirio, el lanzamiento de misiles de Irán allí y las amenazas rusas a los aviones estadounidenses- como “un desastre”.

“Un lío es lo que sucedió en Irak en 2003, y Libia en 2011”, dijo. “Gracias a determinadas acciones rusas en Siria, ese país no es un desastre”.

El experto en política exterior ruso reconoció que existía el riesgo de enfrentamientos directos con Estados Unidos en Siria, pero dijo: “Esta no es nuestra elección y nuestros militares están haciendo todo lo posible para evitar esa eventualidad”.

La visita rápida de Kosachev y Ozerov y la reunión con el Comité de Asuntos Exteriores y Defensa es la segunda entrega de un discurso intensificado instituido el año pasado para “fortalecer el diálogo” entre parlamentarios. Kosachev dijo que este tipo de comunicación permite un grado de cooperación más estrecho que las reuniones meramente recíprocas de vez en cuando por los parlamentarios. Y es un mecanismo que Moscú sólo tiene con algunos otros parlamentos alrededor del mundo, como Francia.

Las conversaciones con el comité de la Knesset, incluyendo un viaje con su presidente Avi Dichter a la frontera con la Franja de Gaza, se centraron en dos áreas, dijo. La primera fue la región, incluida Siria e Irán, y la segunda, las relaciones bilaterales.

Fuente: The Jerusalem Post – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico