Enlace Judío México.- Aceptar una Corea del Norte nuclear probablemente signifique un Japón nuclear.

THE WALL STREET JOURNAL

Los residentes del norte de Japón se despertaron el martes con las sirenas y advertencias por teléfono celular de ponerse a cubierto mientras un cohete norcoreano volaba sobre sus cabezas. La prueba del misil de alcance intermedio enturbiará más la política de seguridad en Asia Nordeste y es otro acicate para que Japón adquiera su propia disuasión nuclear.

Pyongyang probó misiles de largo alcance sobre Japón en 1998 y el 2009, afirmando que eran lanzamientos de satélites. El primero sorprendió a los japoneses y llevó a la cooperación con Estados Unidos en el escenario de defensa misilística. Después del segundo, Tokio recortó las fuentes de financiación del Norte dentro de la comunidad étnica coreana de Japón. El lanzamiento del martes es aún más amenazante porque las agencias de inteligencia norteamericanas y aliadas evalúan que Corea del Norte ahora tiene la capacidad de atacar a Japón con una ojiva nuclear miniaturizada montada en un misil.

Mucho de Japón está protegido por sus propias defensas misilísticas tanto como por sistemas operados por fuerzas de Estados Unidos en la región. Japón también desplegó hace poco cuatro baterías de defensas misilísticas Patriot PAC-3 al oeste del país, pero estas no cubrían la isla norteña de Hokkaido sobrevolada por el misil del martes.

La seguridad fundamental de Japón es la defensa y paraguas nuclear de Estados Unidos, con su garantía del tratado que Estados Unidos responderá si Japón es atacado. Pero la lógica de la disuasión depende de tener como adversario a un actor racional, y no puede garantizarse la racionalidad en Corea del Norte. Su desarrollo reciente de un misil balístico intercontinental capaz de atacar el continente estadounidense también cambia la ecuación. Si Corea del Norte atacara Tokio y Estados Unidos respondiera con un ataque sobre Pyongyang, podrían entonces ser puestas en riesgo ciudades estadounidenses.

Los líderes japoneses se han resistido durante mucho tiempo a construir su propio arsenal nuclear, pero eso podría cambiar si concluyen que Estados Unidos no es de fiar en una crisis. O los japoneses pueden decidir simplemente que no pueden hacer que su supervivencia dependa incluso del juicio de un aliado fiel. Algunos políticos japoneses ya están hablando sobre su propia disuasión nuclear. Y si bien la opinión pública se opone actualmente a las armas nucleares, el miedo podría cambiar las mentes. Japón tiene suficiente plutonio de sus reactores nucleares civiles para más de 1,000 ojivas nucleares, y tiene la experiencia para construirlas en meses.

Esta perspectiva debe alarmar a China, la cual de pronto enfrentaría a un rival regional con armas nucleares. Estados Unidos también tiene un fuerte interés en impedir un Japón nuclear, no menos debido a que Corea del Sur podría pronto seguir el ejemplo. Asia Oriental se uniría al Medio Oriente en una nueva era de proliferación nuclear, con graves riesgos para el orden mundial. Esta es una razón por la que es tan peligroso dar consentimiento a una Corea del Norte con misiles nucleares.

Sin embargo esta es la línea vendida ahora por la ex Asesora en Seguridad Nacional de Obama, Susan Rice, y el ex Director de Inteligencia Nacional, James Clapper, quien dice que Estados Unidos debe comenzar “a aceptarlo y tratar de ponerle fin o controlarlo.” Habiendo dicho durante ocho años que una Corea del Norte nuclear es inaceptable, ellos ahora dicen que es mejor que el Presidente Trump y el primer ministro japonés Shinzo Abe se acostumbren a eso.

¿Pero “controlarlo” cómo? Corea del Norte ha dejado en claro que no negociará cesar su programa nuclear. Estados Unidos puede amenazar con la destrucción mutua asegurada, pero la prueba del misil del martes sobre Japón muestra cómo Corea del Norte usará su amenaza nuclear para coaccionar y dividir a Estados Unidos y sus aliados. Aceptar una Corea del Norte nuclear significa aceptar un mundo mucho más peligroso.

 

 

Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico