Enlace Judío México – Reflexión y bendición del Rabino Mario Hendler de Beth Israel Community Center para Rosh Hashaná 5778.

“Es un momento de búsqueda, de reflexión y muy importante, en el cual cada yehudí y el pueblo judío todo se encuentra ante las puertas de renovar todo aquello que es posible.

Es el principio de la vida, de todo lo que fue el bereshit bará Elohim, el principio en que D-os creo absolutamente todo lo que nos rodea. En esta sociedad somos responsables de mejorar y de hacer todo lo bueno posible para que el mundo, la sociedad y para que cada ser humano sea partícipe y testigo permanente del cambio hacia las cosas positivas y hacia los valores que nuestra Torá nos enseña.

Es un momento apropiado de búsqueda intensa en donde todos podamos refugiarnos en nuestra tefilá, en nuestra creencia en HaShem. En creer en el hombre como valor fundamental de vida que tenemos. En compartir, deseos, ideas, pensamientos y reflexiones para de esta forma tratar de involucrar todo aquello que nos rodea hacia cambios que sean substanciales en los que podamos ver que es posible una vida mejor y un mundo mejor.

Como dicen nuestros sabios de Pirkei Avot: no estamos obligados a terminar toda la obra pero no podemos sustraernos de hacer aquello que está en nuestras manos hoy, aquí y ahora.

En estas horas de Teshuvá que estamos recorriendo en estos días, creo que es nuestra función fundamental encarar este sinceramiento en favor de cada uno de nosotros, familia, individuo, sociedad y la comunidad del mundo, de este México que nos tiene tomados de la mano en una vivencia permanente con nuestra Tierra de Israel a la cual deseamos que la paz sea la corona que termine de consolidar el renacimiento del pueblo judío.

Más aún que este año 5778 (תשע״ח) se celebran 70 años de la fundación del estado de Israel. El regocijo, la alegría y la felicidad deben de estar presentes permanentemente. Esperamos que este año pueda llegar a ser de Jayim (vida), como la letra Jet del número 8.

Una vida que sea realmente testigo permanente del mejoramiento de todo aquello que es posible. Si tu y yo lo pensamos, lo ponemos en práctica y todos en conjunto aportamos nuestro granito de arena, seguramente que en este nuevo año será positivo, será bueno y tendrá toda la brajá dulce sincera y pura que todos esperamos y que nos deseamos por igual.

Para todos queridos amigos, ¡Shaná Tová uMetuká!. Un año bueno y dulce. Que todo lo que deseamos, queremos y esperamos pueda hacerse realidad”.