Enlace Judío México – Estados Unidos le ha dado a Cuba un plazo de siete días para retirar a 15 diplomáticos de su sede en Washington, en una nueva escalada de la crisis que atraviesan ambos países.

La decisión del gobierno liderado por Donald Trump se produce tars meses de misteriosos ataques contra diplomáticos estadounidenses que llevaron a la Casa Blanca a retirar a su propio personal de La Habana, según la BBC.

La solicitud de Estados Unidos marca otro gran revés para las relaciones entre loa psíses este país y Cuba que recientemente habían renovado relaciones diplomáticas después de medio siglo de hostilidad. Washington busca proteger a sus propios diplomáticos de supuestos ataques acústicos que han dañado al menos a 22 estadounidenses en La Habana.

Un funcionario del Departamento de Estado dijo a periodistas el martes que hay 22 víctimas confirmadas  de los misteriosos ataques que han enfriado de nuevo las relaciones entre ambos países. Estados Unidos no ha podido determinar “quién ni qué” los produce, dijo.

Un representante del Departamento de Estado entregó una nota diplomática comunicando la expulsión al embajador cubano, José Ramón Cabañas, el martes en la mañana. También entregó una lista con los nombres de los funcionarios que EE.UU. quiere fuera del país, aunque no los declaró persona non grata.

“La decisión se tomó debido a que Cuba no tomó las medidas apropiadas para proteger a nuestros diplomáticos de acuerdo con sus obligaciones en virtud de la Convención de Viena. Esta orden garantizará la equidad en nuestras respectivas operaciones diplomáticas”, dijo el secretario de Estado Rex Tillerson.

“Estados Unidos es responsable del deterioro presente y probablemente futuro de las relaciones bilaterales”, declaró el canciller Bruno Rodríguez Parrilla y ha respondido “de manera precipitada, inapropiada e irreflexiva y sin evidencias sobre los supuestos hechos en los que Cuba no tiene responsabilidad alguna”, añadió.

El canciller dijo que un equipo de investigación cubano concluyó que “no existe evidencia de la ocurrencia de los alegados incidentes ni de las causas ni del origen de las afecciones de salud notificadas por los diplomáticos estadounidense y sus familiares”.

Rodríguez dijo que agencias de seguridad estadounidenses que investigan los supuestos ataques viajaron a Cuba por primera vez en 50 años en junio, agosto y septiembre de este año, y se reunieron con su contraparte cubana. Pero Estados Unidos no envió la evidencia necesaria para esclarecer los hechos ni ofreció acceso a los afectados, pese a la insistencia del gobierno cubano, señaló. Asimismo, dijo que no han identificado “autores, o personas con motivación o los medios” para realizar estos ataques, “ni se ha establecido presencia de personas sospechosas” en el país.

Rodríguez mencionó que el gobierno cubano no está “familiarizado” con la tecnología que podría haber causado los ataques y que inmediatamente reforzó la seguridad de los diplomáticos de EEUU. También aseguró que su personal diplomático en Washington no realiza labores de inteligencia.

Con información de La Vanguardia y el Nuevo Herald