Enlace Judío México – El nuevo tratamiento aprovecha el propio sistema inmunitario del cuerpo para reconocer y atacar a las células cancerosas.

MAX SCHINDLER

La agencia estadounidense de Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) autorizó la comercialización de un tratamiento para alterar los genes de pacientes que sufren de tipos de linfoma no Hodgkin.

El fármaco, llamado Yescarta, fue desarrollado por Kite Pharma, fundada por el israelí-estadounidense Arie Belldegrun, y se espera que cueste unos 373.000 dólares. Kite fue adquirida por Gilead Sciences en agosto con una cifra de 11.900 millones de dólares, y el avance de hoy puede haber ayudado con la venta.

El medicamento se distingue de otros productos farmacéuticos en que cada dosis ofrece un tratamiento personalizado que se realiza a partir del propio sistema inmune del paciente para combatir el linfoma. Las células T que combaten la infección del paciente se extraen, se modifican genéticamente con un nuevo gen para identificar las células cancerosas y se transfieren nuevamente en el paciente, donde se forma un “ejército” para atacar y destruir las células malignas, incluso durante años.

“Hoy se marca otro hito en el desarrollo de un nuevo paradigma científico para el tratamiento de enfermedades graves. En solo unas décadas, la terapia genética ha pasado de ser un concepto prometedor a una solución práctica a las formas mortales y en gran parte intratables del cáncer”, dijo en un comunicado el comisionado de la FDA, Scott Gottlieb.

El tratamiento se desarrolló por primera vez en el Instituto Nacional del Cáncer, dirigido por el Dr. Steven Rosenberg, que firmó un acuerdo con Kite Pharma en 2012. Kite ayudó a financiar el proceso de investigación, a cambio de recibir regalías de patentes.

Yescarta es el segundo tratamiento aprobado por la FDA que modifica los genes y que trata tipos de linfoma no Hodgkin, o adultos que sufren de linfoma difuso de células B grandes.

El fármaco ayudará a tratar a pacientes que no respondieron a dos tipos de tratamiento inicial. La tasa de remisión completa tras el tratamiento con Yescarta se situó en el 51 por ciento, mucho más alta que los ensayos clínicos comparables. Sin embargo, también se sabe que el medicamento causa efectos secundarios potencialmente mortales.

“Con la aprobación de Yescarta, esta innovadora clase de terapias de células CAR-T, beneficiará a adultos con ciertos tipos de linfoma que no han respondido a tratamientos previos”, dijo Peter Marks, director del Centro de Evaluación e Investigación de productos biológicos de la FDA.

El linfoma difuso de células B grandes es el tipo más común de la enfermedad en adultos, con unos 72,000 nuevos pacientes diagnosticados cada año en Estados Unidos, según la Sociedad Americana del Cáncer.

Fuente: The Jerusalem Post / Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico