Enlace Judío México.- La agencia de refugiados de la ONU dice que “Israel tiene obligaciones legales para proteger a los refugiados” mientras los ministros sopesan un nuevo programa de expulsión

La agencia de Naciones Unidas para los refugiados expresó “seria preocupación” el viernes por el plan de Israel de deportar o encarcelar a miles de inmigrantes africanos en los próximos meses.

La propuesta del ministro del Interior, Aryeh Deri, y del ministro de Seguridad Pública, Gilad Erdan, cerraría el centro de detención Holot del sur de Israel para inmigrantes africanos en un plazo de cuatro meses, anticipándose a las deportaciones a gran escala. Quienes rechacen la deportación serán encarcelados.

Los ministros votarán el nuevo plan el domingo.

En una declaración, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados dijo que estaba “seriamente preocupado por las propuestas anunciadas ayer … Bajo estas propuestas, los eritreos y los solicitantes de asilo sudaneses y refugiados se verían obligados a aceptar la reubicación en países de África o enfrentar el encarcelamiento en Israel“.

La agencia señaló que “Israel tiene obligaciones legales para proteger a los refugiados y otras personas que necesitan protección internacional“.

El plan israelí reconoce los esfuerzos para intensificar las deportaciones de migrantes africanos en los próximos meses.

A la luz de la intención de ver la partida de infiltrados a gran escala hacia terceros países, podemos reconsiderar la necesidad de que continúen existiendo las instalaciones de Holot, ya que la salida de los infiltrados podría venir directamente de los centros de las ciudades a los terceros países“, decía.

Los ministros sugirieron mantener Holot abierto por otros cuatro meses, después de lo cual se cerraría a menos que los ministros firmen otra extensión.

En agosto, el Tribunal Superior de Justicia aprobó la política de emigración, pero también dictaminó que las autoridades israelíes debían garantizar primero que los países a los que se estaba deportando a los migrantes eran seguros. Aunque el estado no ha nombrado a los terceros países, estos han sido identificados en informes de los medios de comunicación como Ruanda y Uganda.

La expulsión a un tercer país no tiene precedentes en el mundo occidental. Italia y Australia firmaron acuerdos similares con terceros países: Italia con Libia y Australia con Malasia, pero ambas propuestas fueron rechazadas por los tribunales locales. En ambos casos, los tribunales dictaminaron que los proyectos de ley eran incompatibles con el derecho internacional y la Convención de las Naciones Unidas sobre refugiados de 1951, de la que Israel también es parte.

La Autoridad de Población e Inmigración dice que más de 40,000 inmigrantes africanos ilegales residen en Israel a partir de 2016, casi todos de Eritrea y Sudán. Muchos viven en los barrios más pobres del sur de Tel Aviv. Algunos residentes israelíes los han culpado por el aumento de las tasas de criminalidad en la ciudad.

Muchos de los migrantes dicen que huyen del conflicto y la persecución y buscan el estatus de refugiados. Los funcionarios israelíes sostienen que son inmigrantes económicos y se han resistido a los llamados a reconocerlos como refugiados.

Fuente: The Times of Israel – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico