Enlace Judío México.- Mohamed Amer Odeh nació en Nicaragua, de padres palestinos, estudió medicina en Cuba y en Madrid, donde se especializó en virología. Trabajó en el ministerio de Salud palestino y desde el año 2008 es el Presidente del Departamento para América Latina e Iberoamérica en el Comisionado de Relaciones Internacionales de Al Fatah, en la Autoridad Nacional Palestina. Su hermano es el actual embajador palestino en Madrid.

EDGARDO KRAWIECKI PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO

Conversamos con él antes de su viaje a Brasil de esta semana, donde se reunió con el ex presidente Ignacio Lula Da Silva, con la precandidata a la próximas elecciones por el PC do Brasil, Manuela D’Avila, y con la periodista Thea Rodríguez, de San Pablo, que es una conocida simpatizante de la causa palestina.

Dialogamos sobre los temas más candentes de la actualidad palestina, de las relaciones con Israel y de la unión de Hamás con Al Fatah.

E. K.- ¿Cómo cambia la perspectiva de la ANP con respecto a volver a la mesa de las conversaciones con Israel tras el acuerdo de Unidad con Hamás?

M.A.O.- “La reconciliación palestina fortalecerá las perspectivas de la Autoridad Nacional Palestina para reanudar las negociaciones partiendo de dos factores: 1) La OLP es la única encargada de negociar la paz con Israel. 2) Eliminar el pretexto que se utilizaba en Israel y en el mundo, de que la ANP no representa a todos los palestinos”.

E.K.- ¿Entonces van a ir a elecciones con Hamás para fines del 2018, a pesar de que Al Fatah pudiera perder el poder palestino?

M.A.O.- En ello estamos. Lo estamos aún hablando y es muy posible que finalmente sea lo que suceda, que todos los palestinos decidamos nuestro futuro en elecciones libres y democráticas.

E.K.- ¿El reciente acuerdo de Unidad con Hamás va a ser un nuevo fiasco como el del 2011, o va a seguir adelante, y Abu Mazen va a tomar finalmente el control de Gaza aunque Hamás no deponga sus armas?

M.A.O.- “Los acuerdos anteriores, como el del 2011, que también tuvo la mediación egipcia, nunca llegaron a ser implementados, y fracasaban desde su cuna, apenas nacían. Mientras que este último intento de unidad se está llevando a cabo de una manera firme, y por ello creo que en poco tiempo más la ANP controlará todo el territorio palestino, tanto de la Margen Occidental como la Franja de Gaza. Ya hemos comenzado con el traspaso de los controles fronterizos e iremos avanzando también en otros asuntos que profundizarán todo este proceso de unidad”.

E.K.- ¿Ven alguna posibilidad, incluso con la mediación de Trump y su yerno Kushner, de reanudar el proceso de paz entre Israel y los palestinos en el corto o mediano plazo?

M.A.O.- “La intermediación de Trump solo tendrá efecto si logra cambiar la postura del Gobierno de Israel. No vemos ningún resultado sobre el terreno de todo lo que han dicho o intentado. Su yerno habló de algunas ideas, pero no hablan ni él ni Trump de ningún proyecto en concreto. Los palestinos reconocen al Estado de Israel y éste deberá reconocer al Estado Palestino. El intento de volver al diálogo siempre es bueno. Más en un momento en que todo parece estancado, o podríamos decir congelado. El proceso de paz parece estar muerto y sería muy bueno que alguien pudiese revivirlo”.

E.K.- ¿Cuál es el principal escollo para la paz, hoy?

M.A.O.-“El mayor obstáculo hoy día para llegar a la paz radica en la postura del Gobierno derechista de Israel y su práctica de colonización y construcción de asentamientos. El fin de semana pasado Netanyahu dijo que no había un Estado Palestino. Que no venga después a hablarnos de los dos estados como decía que ya estaba de acuerdo en su famoso discurso de Bar Ilán. Yo por la paz con los israelíes iría hasta el fin del mundo y haría lo posible por dialogar con cualquiera que podría aportar al proceso de paz. Y no creo que Netanyahu pueda pensar en hacer lo mismo. Él parece estar muy cómodo donde está”.

E.K.- ¿Has Estado en la Cumbre de Madrid de 1991 como parte de la delegación palestina?

M.A.O.- “Estuve en contacto, aunque no era parte de la delegación palestina. En ese año estaba terminando mi especialización en virología en Madrid. Si recuerdas, no era una delegación palestina sino una delegación jordano-palestina. Como tenía mis contactos, en los pasillos conversaba con parte de la delegación israelí, con colegas de la parte palestina e incluso en la televisión española participé en un debate con el ex embajador israelí Shlomo Ben Ami, que es mi amigo. Para mí, Shlomo Ben Ami es la voz racional de Israel. No dice lo que a mí me gustaría escuchar, pero es una persona que quiere escuchar lo que dice la contraparte palestina. Es una persona que quiere llegar a un acuerdo. Pero es lógico que los enemigos no coincidamos en todos los puntos. Pero si hay gente dispuesta a dialogar, hablar y negociar, como Shlomo Ben Ami, esto siempre da una luz de esperanza”.

E.K.- Tú, Mohamed, como nicaragüense de nacimiento, ¿cómo ves la reciente apertura de una oficina de negocios entre Israel y Nicaragua el pasado 31 de octubre y el papel que ha jugado en ello el presidente Daniel Ortega?

M.A.O.- “Como nicaragüense de origen palestino, creo que conociendo la postura de Nicaragua, que abriendo las oficinas de negocios ayudaría a que Nicaragua pudiera jugar un papel positivo al conflicto, lo puedo entender. Puedo decir también que no se hace nada en Nicaragua sin la intervención de Daniel Ortega. Por lo tanto es también una decisión suya”.

E.K.- El sábado 4 de noviembre fue el 22 aniversario del asesinato de Rabin ¿Cómo fue visto desde el lado palestino?

M.A.O.- “La conmemoración del asesinato del ex primer ministro Rabin y la multitud de miles que hubo en la plaza de Tel Aviv, que lleva su nombre, reafirman que quien mató a Rabin quería matar a la paz pero no pudo, ya que la mayoría de la gente de los dos pueblos quieren la paz, y el gran número de participantes es una cabal muestra de ello. Yo siempre quiero estar junto a mis amigos israelíes que quieren la paz”.

E.K.- ¿Cómo ven esto mismo desde Ramala, a la luz de lo que fue el proceso de Oslo?

M.A.O.- “Oslo fue el mejor resultado de una negociación para solucionar un conflicto que en su momento había durado 30 años. El problema radica en que ni la parte israelí ni la parte palestina han podido aprovechar un acuerdo que sí pudo haber puesto un fin a este conflicto. El acuerdo de Oslo ofrecía muchas ventajas. Creo que aún puede llegar a ser la base de futuras negociaciones serias, con buenas intenciones, para poder llegar a una solución global del conflicto entre nosotros los palestinos y los israelíes”.

E.K.- ¿Vamos hacia un Estado binacional o hacia los dos Estados, uno israelí y otro palestino?

M.A.O.- “Creo que la solución de los dos Estados es la mejor. Los israelíes quieren un estado para los judíos y los palestinos para nuestra gente. Pero viendo cómo están las cosas no sé si ahora tiene mucha viabilidad la fórmula de los dos Estados con toda la presencia de colonos en los territorios ocupados y la construcción en los asentamientos son obstáculos fuertes para poder tener un Estado Palestino independiente, con continuidad territorial. Netanyahu constantemente sigue autorizando construcciones en los asentamientos y de este modo no puede haber diálogo de paz posible entre nosotros y su gobierno. No hay ningún problema en el mundo, salvo la muerte, que no tenga solución. También el conflicto entre israelíes y palestinos puede tener una solución. Y creo que en algún momento del futuro la va a haber”.

E.K.- ¿Cómo ven desde Ramala a los túneles de ataque que Hamás cava desde Gaza hacia territorio israelí?

M.A.O.- “Una vez implementado el acuerdo de reconciliación y ejercido el control de la ANP sobre Gaza, solo se hará una lucha pacífica y popular, y no violenta contra la ocupación. Y ésta es la postura de la ANP y todos los palestinos deberán acatarla. También los de Hamás en Gaza. Puedo decir desde el lado palestino que el presidente Abu Mazen tiene toda la decisión para ir hacia la paz y lograrla. Lo dice en público y en privado con las mismas palabras. También le dice a Hamás que deje de atacar con cohetes a Israel. Si tuviera realmente una contraparte en lsrael para poder avanzar en las negociaciones, también el tema de los túneles se podría solucionar”.