Enlace Judío México – El dron iraní que se infiltró en el espacio aéreo israelí y la represalia de Israel en Siria este sábado equivalen a una escalada tangible en el enfrentamiento entre ambas partes. Pero ninguno de los dos bandos parece querer una guerra a gran escala en este momento, y la diplomacia rusa puede ayudar a calmar la situación.

BEN LYNFIELD

Irán envió el avión no tripulado que se infiltró en el espacio aéreo israelí el sábado en la madrugada para señalar a Israel que no aceptará más ataques contra blancos iraníes en Siria, según Meir Litvak, experto en Irán de la Universidad de Tel Aviv.

“Irán intenta establecer una línea roja a Israel. Su mensaje es: ‘Puedo entrar en tu territorio y atacarte, así que deja de hacer lo que nos estás haciendo’”.

Irán tienen la intención de seguir estableciendo bases militares en Siria, dice Litvak y agrega que sus generales se refieren al Mediterráneo como la frontera estratégica occidental de la República Islámica. “Se trata de si los iraníes sólo están interesados en disuadir a Israel, o si algunos elementos en Irán buscan una semi guerra para involucrar a sus proxies en Siria y convertir los Altos del Golán en otro frente”.

Cualquiera que sea el caso, el avión no tripulado, según las evaluaciones israelíes, aumenta las tensiones aunado al establecimiento de bases iraníes, el despliegue de milicias, y la construcción de fábricas de armas en Siria. “Israel ha atacado algunas de estas bases sin que ninguna de los partes lo admita. Pero ahora Irán ha desafiado abiertamente las reglas con el dron, provocando una fuerte respuesta de Israel”, agregó Gabriel Ben-Dor, experto en Oriente Medio de la Universidad de Haifa.

Litvak explica que Irán no quiere una guerra a gran escala en Siria, en parte porque la guerra civil – en la que respalda al régimen de Assad- aún no ha terminado, y Hezbolá, su aliado, aún está involucrado en la lucha. “Su pensamiento es: ‘dejemos que Hezbolá vuelva al Líbano para reagruparnos y reorganizarnos y pasar a la siguiente fase’. Los iraníes prefieren un conflicto de baja intensidad, en el que las milicias chiítas atacan desde el lado sirio de los Altos del Golán, a una guerra a gran escala”.

Ben-Dor espera que los incidentes del sábado activen la diplomacia rusa para encontrar una fórmula sobre la presencia iraní en Siria que sea aceptable tanto para Israel como para Irán. En su opinión, Rusia no debe verse estrechamente alineada con Teherán, ya que tiene sus propias preocupaciones de que Irán sea demasiado dominante en Siria.

Él considera que los intensos ataques de Israel el sábado no habrían sido posibles sin el consentimiento ruso. Y la declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia sobre la escalada del sábado no condenó a Israel.

“Instamos a todas las partes involucradas a que actúen con moderación y eviten cualquier acción que pueda complicar aún más la situación. Consideramos que es necesario respetar incondicionalmente la soberanía y la integridad territorial de Siria y otros países de la región”, dijo el comunicado.

“Irán es un buen aliado de Rusia en la lucha, pero los rusos no quieren verlo como una gran potencia regional que controle a Siria. Prefieren que el régimen, algunos de los rebeldes e Israel coexistan de alguna manera. Los iraníes son propensos a la hostilidad y la violencia, algo que los rusos no quieren en este momento”, dice Ben-Dor.

En su opinión, la diplomacia rusa tendría que abordar las preocupaciones israelíes y no permitir el desarrollo masivo de armas iraníes en Líbano y Siria, y las bases iraníes deberían alejarse lo más posible de los Altos del Golán. Irán, por su parte, obtendría legitimidad para mantener sus fuerzas en Siria como uno de los principales pacificadores que deben tenerse en cuenta en un futuro acuerdo.

Israel tendrá que aceptar alguna presencia iraní en Siria, agrega Ben-Dor. “Depende de cuántas y qué tipo de bases. Israel no podrá expulsar a Irán de Siria porque ha estado luchando allí en el lado ganador y no es posible negarle los frutos de la victoria. Pero su capacidad ofensiva en Siria tendrá que ser controlada porque de lo contrario será demasiado amenazante para Israel”.

“La pregunta es cuántos iraníes permanecerán en Siria y cuál será su capacidad. Israel está tratando de asegurarse de que su capacidad sea muy limitada, y ellos se resisten a limitarlas tanto en Siria como en el Líbano”.

Litvak coincide en que los rusos pueden ayudar a salir de la crisis, por ahora. “No estoy seguro de que los iraníes quieran una guerra a gran escala y nosotros tampoco.. Tal vez ambas partes respondan a la presión de Rusia para calmar la situación.

“Pero no creo que Irán deje de aumentar su presencia militar debido a los ataques israelíes, porque Israel lo ha estado haciendo durante un año y no ha logrado detenerlo. Eventualmente, podemos encontrarnos en una guerra porque queremos detenerlos, ellos no quieren ser detenidos, cada parte aumenta las tensiones, y eso puede llevar a un conflicto armado”, dijo Litvak.

Fuente: The Jerusalem Post / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico