Enlace Judío México.- En su discurso del domingo en la Conferencia de Seguridad de Munich, el primer ministro Benjamin Netanyahu dijo que, de ser necesario, Israel atacaría directamente a Irán. Esta fue una declaración muy inusual, ya que es inaceptable que los líderes de los países amenacen públicamente a un estado soberano normal, que no está colapsando o en caos, como Siria, por ejemplo.

GENERAL DE DIVISIÓN (ret.) YAAKOV AMIDROR

Las amenazas explícitas entre países no son algo con lo que se pueda jugar, pero en mi opinión, la clave de la declaración inusual de Netanyahu radica en lo que subrayó de antemano.

Después de detallar las agresivas maniobras de Irán en la región, Netanyahu relató la incursión de aviones teledirigidos iraníes en el espacio aéreo israelí y concluyó diciendo: “Actuaremos si es necesario, no solo contra los representantes de Irán que nos están atacando, sino contra el mismo Irán“.

Hasta ahora, los iraníes fueron muy cuidadosos. Estaban dispuestos a luchar contra Israel hasta que los últimos milicianos chiíes libaneses e incluso importados de Irak, Pakistán y Afganistán realizaran su sucio y peligroso trabajo en Siria, pero la incursión de los drones violó lo que hasta ahora era tabú. Irán atacó a Israel directamente y, por lo tanto, Netanyahu hizo lo correcto al advertir que cruzó una línea y que pagará un precio.

Ahora la pelota está directamente en la cancha de Irán y sería interesante ver si está dispuesto a arriesgarse directamente o volver a hacer lo que mejor sabe hacer: usar sus poderes para perseguir sus intereses en la región.

Tratar con Irán requiere tomar riesgos. La amenaza que plantea es demasiado grande para ignorarla, y al final del día, los que toman las decisiones están en Teherán, en ningún otro lugar.

Fuente: Israel Hayom – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico