Enlace Judío – Una de las tradiciones más queridas y respetadas de Purim son las Mishloaj Manot. En Purim es una obligación hacer un regalo con comida para al menos una persona. Es una mitzvá muy bonita las familias y amigos se juntan para hacerlo y la gente suele darlas a todos sus amigos cercanos. Es parte importante de la felicidad que se vive en Purim. Sin embargo, ¿Cuál es su significado? ¿Por qué lo hacemos? Y ¿Por qué específicamente debe ser con comida? Rab. Yehuda Prero nos lo explica en el siguiente artículo.

El regalo de la Unidad. Rab. Yehuda Prero

El Terumat HaDeshen explica que nuestra felicidad en Purim debe ser expresada a través de un banquete o una fiesta. Sin embargo, hay muchas personas que debido a circunstancias económicas no pueden organizar una celebración. Por ello mismo, el Terumas HaDeshen explica, nos mandamos regalos de comida los unos a los otros. De esta forma nos aseguramos que todos podamos tener comida con la cual podamos celebrar. Además, escribe el Jasam Sofer, dado que no queremos avergonzar a los pobres, con esta mitzvá, los pobres dan regalos a los ricos y los ricos a los pobres por igual. Todos los miembros del pueblo de Israel dan indiscriminadamente a sus hermanos y hermanas de tal forma que todos puedan celebrar un Purim con alegría y sin pena.

Otra razón por la cual se hace la explica Rav. Shlomo Alabetz. Hamán describió a la nación de Israel, frente a Asuero como “un pueblo dividido y disperso entre las naciones”. Algunos comentaristas mencionan que Hamán señalaba al pueblo judío como una nación vulnerable porque tenían grandes disputas internas, no se relacionaban entre sí, de tal forma que en su corazón estaban divididos y dispersos. Al final, cuando se le dio la oportunidad de atacar a sus enemigos, antes de que el decreto de Hamán se efectuara, los judíos demostraron ser una fuerza unida. Para fomentar los sentimientos de cercanía, amor y solidaridad nos mandamos regalos en Purim. De esta forma cada año, mostramos que nos interesa el bienestar de nuestro amigo y que tenemos el deseo de mantener la unidad a través del judaísmo.

Un tercer motivo es explicado por el Jasam Sofer y el rebe de Ostrovtza. Durante el reinado de Asuero y específicamente durante la gran fiesta que organizó, muchos judíos reverenciaron y se hincaron ante ídolos por miedo a la represión del rey. Sin embargo, ni uno de ellos sabía si su correligionario se había convertido en un idolatra o era simplemente un disfraz que usaba, no sabían si los otros habían abandonado su fe. Cuando el pueblo judío fue salvado, pudieron ver con mayor claridad. Para demostrar que cada uno confiaba en que el otro seguía siendo judío y creía en el D-s verdadero se mandaron regalos de comida. Al aceptar los regalos demostraron confiar en su hermano, forjaron un nuevo lazo de confianza entendimiento y unidad.

El denominador común de todas estas razones es que las Mishloaj Manot sirven para unirnos como un pueblo. Esto puede ser a través de ayudar a otros a celebrar como cada familia lo hace. Puede ocurrir por actos de alegría y bondad desinteresados y aleatorios. Puede ocurrir a través de la aceptación que damos a nuestros hermanos. Debemos aprovechar esta oportunidad para unirnos como un pueblo. Schlaj Manot no deben ser dados sólo a amigos y familiares. Debemos darlos también a la persona nueva que llegó al shul, que acaba de mudarse la semana pasada. Debemos darlo a la gente con la que hemos peleado; al necesitado, a la viuda, al divorciado, al huérfano, a cualquier persona que merezca nuestra ayuda y atención. Purim debe ser un día de alegría para todos y un día en el que experimentamos alegría como uno sólo.

Mishloaj Manot es un medio para este fin.

Fuente: torah.org