Enlace Judío México – La Suprema Corte de Justicia ordenó el martes al ministro de Defensa, Avigdor Lieberman, que permita el ingreso de 90 palestinos a Israel para participar en una ceremonia alternativa de israelíes y palestinos el Día de los Caídos, diciendo que su decisión de prohibir su ingreso es “irracional” y “desequilibrada”.

La décimotercera ceremonia “alternativa” del Día de los Caídos, organizada por Combatientes por la Paz y las Familias Afro-Palestinas en duelo por la paz, se llevará a cabo el martes a las 9:00 pm, (hora local) en el Parque Ganei Yehosha de Tel Aviv. Se espera que asistan más de 4.000 personas.

“Creemos que la frase ‘Con su muerte, nos ordenaron vivir’, no es sólo un lema, sino también un llamado a la acción”, dijeron los organizadores. “Trabajamos para cambiar la realidad juntos, para hacer realidad la esperanza compartida de paz y para permitir que todos los que viven en esta porción de tierra vivan”.

La ceremonia será precedida por el autor David Grossman, cuyo hijo cayó en la Segunda Guerra del Líbano, y la Dra. Amal Abu Saad, cuyo marido Yaqoub Abu al-Qiyan murió a manos de la policía en Umm al-Hiran,.

“Hemos decidido que el orden condicional sea perentorio e instruir al ministro de defensa que permita el ingreso de 90 palestinos a Israel para participar en la ceremonia conjunta, similar a la cantidad de permisos otorgados en 2016, siempre que tras una evaluación individual adecuada no haya motivos de seguridad u otras razones para no permitirlo”, dictaminó la Corte Suprema.

Los organizadores de la ceremonia recibieron con beneplácito el fallo de la Corte Suprema y enfatizaron: “Estamos satisfechos de que la corte haya dejado claro que incluso el ministro de Defensa tiene limitaciones, y que debe conservar sus preferencias personales para sí mismo. La ceremonia de recordación israelí-palestina se llevará a cabo este año con la participación de los palestinos también, y será la más grande desde que se celebró por primera vez hace 13 años. Se invita al público en general a participar”.

Los organizadores del evento apelaron a la Corte Suprema luego de que el Ministerio de Defensa rechazó las solicitudes de 110 palestinos para ingresar a Israel a fin de participar en la ceremonia, argumentaron que el ministro de Defensa estaba motivado por consideraciones políticas y no tenía autoridad para rechazar las solicitudes.

“La decisión del ministro de Defensa no toma en cuenta la realidad creada a lo largo de los años y las expectativas legítimas de los que asisten a la ceremonia”, escribió la corte. “Ignora por completo el daño a las familias en duelo y al público que desea participar como lo ha hecho en años anteriores”.

El Coordinador de Actividades Gubernamentales del Ministerio de Defensa en los de Territorios dijo a Lieberman que los palestinos que fueron invitados no representaban una amenaza a la seguridad y recomendó que les concediera permisos de entrada, pero Lieberman rechazó la solicitud, diciendo que la ceremonia conjunta de israelíes y palestinos es inapropiada.

“Esta no es una ceremonia conmemorativa, sino una demostración de mal gusto e insensibile que lastima a las familias en duelo que son más preciadas para nosotros”, escribió en Twitter.

Lieberman afirmó que “es nuestro deber respetar el Día de Recordación de los Soldados Israelíes como un día nacional de luto. No permitiré la politización del duelo. Respeto a los jueces de la Corte Suprema, pero mi respuesta para el tribunal es que no estoy dispuesto a ayudar a la profanación del Día de los Caídos. Su decisión crea una equivalencia entre “terroristas” y familias en duelo”.

La policía se desplegará en grandes cantidades fuera del sitio debido a una esperada manifestación de activistas de derecha, incluido el rapero The Shadow, que prometió “sabotear” la ceremonia. El evento del año pasado también atrajo a manifestantes, quienes insultaron y escupieron a los participantes.

“No hay escape, todos debemos oponernos a la deshonrosa ceremonia de los terroristas”, escribió The Shadow en su página de Facebook. “El año pasado protesté contra la ceremonia y me acusaron de cosas que no hice. Dudé si hacerlo (este año), porque no quería alentar a la gente a ir a la ceremonia, pero con el paso del tiempo me di cuenta de que no hay otra opción, debemos hacer que se escuchen los gritos de los caídos. Hubiese preferido recordarlos en paz y tranquilidad, pero me veo obligado a ir, gritar malas palabras y protestar. Si no hacemos esto juntos, esto continuará siendo legítimo”.

Con información de Ynet y The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico