Enlace Judío México.- Las manifestaciones del pasado fin de semana en Gaza produjeron gentíos más pequeños y menos víctimas que las protestas que ocurrieron durante los dos fines de semana previos. Lo que es más, fueron eclipsadas por los ataques aéreos occidentales en Siria. Pero manifestaciones anteriores y más caóticas provocaron que todos los sospechosistas de siempre (Europa, la ONU, y las organizaciones de “derechos humanos”) acusen a Israel de usar fuerza desproporcionada e indiscriminada, y de disparar a “manifestantes civiles desarmados,” todo mientras descartan la insistencia de Israel en que sólo tomó como blanco a terroristas, principalmente miembros de Hamás, quienes estuvieron usando a los manifestantes como cobertura. Pero ahora resulta que una organización palestina concuerda con Israel y el mismo Hamás.

En una columna publicada en Haaretz la semana pasada, el nativo de Gaza, Muhammad Shehada, defendió las manifestaciones como una respuesta necesaria al bloqueo parcial de Israel, al cual él culpó por todas las aflicciones de Gaza. Su hermano menor, dijo él, ha participado en ellas casi diariamente. El mismo está estudiando actualmente en Suecia pero anteriormente trabajó para una organización antiisrael de “derechos humanos” en Gaza. En resumen, él es difícilmente un cómplice de Israel. No obstante, destacó que incluso Hamás cree que el fuego de Israel ha estado lejos de indiscriminado:

“A pesar los tiros vistos en vivo aparentemente arbitrarios y el gas lacrimógeno cayendo sobre los manifestantes… Hamás cree que las víctimas son seleccionadas cuidadosamente, “Israel sabe a quien herir, mutilar o matar,” me dijo un líder de Hamás por teléfono. Al menos diez hombres jóvenes, afiliados a Hamás y las brigadas Qassam, han sido tiroteados mientras mantenían orden en la protesta.”

Hamas cree que Israel está desplegando tecnologías de reconocimiento facial aparte de los numerosos drones de guerra que eliminan desde el cielo. El movimiento advirtió a sus miembros que mantengan cubiertos sus rostros y dejen sus teléfonos en casa.

Esto es lo que Israel ha dicho todo el tiempo. Un informe publicado la semana pasada por el Centro Meir Amit de Inteligencia e Información de Terrorismo (una organización fundada por exfuncionarios de la inteligencia israelí que mantiene vínculos estrecho con las agencias de inteligencia) concluyó que 80% de las personas muertas durante las manifestaciones en Gaza entre 26 y 32 años fueron reconocidas por una organización terrorista tribuyéndose públicamente al occiso como miembro y enterrándolo con la bandera de la organización o publicando fotos de él en traje militar sosteniendo un arma. Este hallazgo explica también por qué todos menos dos de los muertos eran hombres entre los 19 y 45 años: A diferencia de los terroristas, los civiles verdaderos han mantenido en gran medida su distancia del cerco fronterizo.

Por supuesto, Shehada argumentó que los hombres de Hamás estuvieron sólo presentes en las manifestaciones para asegurar que los manifestantes no participaran en violencia antiisrael o intentaran cruzar la frontera dentro de Israel – siendo la implicación que Israel trató deliberadamente de provocar la violencia palestina matando gente que estaba trabajando para detenerla. Y lo que Shehada implicó es que los organizadores de las manifestaciones lo han acusado abiertamente: Israel, dicen ellos, está tratando intencionalmente de provocar a los manifestantes hacia la violencia.

Para ser justos, Hamás tiene un historial de tratar de detener la violencia en esos raros casos en que la violencia no se ajusta a su propia agenda. Pero en este caso, es difícil argumentar que los esfuerzos por violar la frontera no se ajustan a sus planes, porque el líder de la organización en Gaza, Yahya Sinwar, ha declarado repetidamente y que esto es precisamente lo que se proponen hacer las manifestaciones.

En la manifestación del 30 de marzo, Sinwar afirmó que la protesta “no cesará hasta que removamos esta frontera transitoriar.”

Fuente: De Evelyn Gordon- Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México