Enlace Judío – En una declaración oficial, el ministro de Exteriores de la República Checa dijo que los manifestantes protestaban contra las pésimas condiciones de vida en Gaza que son provocadas por el propio Hamás.

El ministro de Exteriores de la República Checa dijo este jueves que Hamás era el único culpable de la reciente violencia que dejó un saldo mortal en la Franja de Gaza.

En una declaración titulada “Gaza: diciendo las cosas como realmente son”, Martin Stropnický, también planteó que las manifestaciones violentas del pasado 14 de mayo en Gaza no tenían nada que ver con la inauguración de la embajada de EE.UU. en Jerusalén ese mismo día. “El conflicto en Medio Oriente ha estado en niveles variables durante muchos años. La reubicación de la embajada de EE. UU. sólo fue utilizada por la organización terrorista Hamás (…) para exacerbar aún más los acontecimientos que había organizado mucho antes”, dijo.

De manera directa, responsabilizó al grupo terrorista, que gobierna Gaza desde el año 2007, por la violencia ocurrida. “El hecho es que Hamás, que también es reconocido por la Unión Europea como una organización terrorista y que aún no reconoce a Israel, es el único verdadero gobernante de la Franja de Gaza, y como tal es totalmente responsable de la forma y los objetivos de la acciones violentas que ocurrieron en la frontera entre Israel y Gaza en las últimas semanas”.

El resultado mortal de las manifestaciones de la llamada “Gran Marcha del Retorno”, que comenzaron desde finales del mes de marzo, y que dejaron una cifra de alrededor de 100 muertos, a los que la mayoría de ellos Hamás ha admitido públicamente como miembros suyos, fue innegablemente “trágico”, consideró Stropnický. “Expresamos inequívocamente nuestra preocupación y arrepentimiento por la pérdida de vidas humanas. En este contexto, sin embargo, debe destacarse que esta preocupación no se trata sólo de las víctimas de la violencia en curso, sino también de sus causas, incluido quién la inició”, aludiendo a Hamás.

Israel aplaudió la posición expresada por el diplomático checo. “El ministro Stropnicky dijo la verdad y lo felicito por eso”, comentó el embajador de Israel en Praga, Daniel Meron, al portal The Times of Israel. “Sus comentarios reflejan las estrechas relaciones entre nuestros dos países, Israel y la República Checa, que se basan en lazos históricos, confianza, apoyo y valores comunes”.

En su larga declaración, Stropnický dijo que los manifestantes protestaban contra las pésimas condiciones de vida en Gaza, provocadas por el propio Hamás. Además, los organizadores de la protesta participaron en una serie de “acciones de provocación que ningún Estado en el mundo podría aceptar, incluidas aquellas que protestan tan vehementemente contra la respuesta de Israel”, dijo.

Se refirió a los constantes intentos de infiltración por gazatíes como un “esfuerzo persistente de los atacantes para romper la valla fronteriza y entrar en Israel”, que puede ser “considerado un acto de terrorismo”, según Stropnický. “De manera similar, otras actividades como la quema de neumáticos y el establecimiento de campos en llamas alrededor de Gaza no pueden ser ignoradas”, dijo en referencia al lanzamiento de cometas incendiarios que han sido lanzados por los palestinos en dirección hacia Israel.

Stropnický también habló sobre los destrozos causados por palestinos sobre el cruce de Kerem Shalom al sur de la Franja, a través del cual entra la ayuda humanitaria al enclave, y que Hamás anima a los adolescentes a protestar en la frontera “para que el mundo pueda acusar a Israel de matar niños”.

Todo mostraba claramente que “a Hamás no le importa su propia gente o a mejorar las condiciones de vida en el territorio que controlaba”, pero busca principalmente fortalecer su propia posición atrayendo la atención mundial. Tal comportamiento, postuló Stropnický, no contribuye a los esfuerzos para resolver el conflicto israelí-palestino. “Las cosas deberían decirse como realmente son”, dijo.

El 15 de mayo, el día después de la mayor manifestación y de la inauguración de la embajada norteamericana, el Ministerio de Relaciones Exteriores checo emitió una breve declaración en la que expresó su preocupación “por la escalada de violencia en Gaza que provocó docenas de víctimas” y pidió “a todas las partes que ejerzan moderación y adopten medidas efectivas para evitar nuevas pérdidas de vidas”.

Junto con Rumania y Honduras, la República Checa es otro de los países que han expresado recientemente de cierta forma su disposición a trasladar la embajada de su país en Israel hacia Jerusalén. El mes pasado, el presidente checo Miloš Zeman expresó su deseo personal de mover la embajada y dio detalles sobre el  proceso en tres etapas que se llevaría a cabo para un movimiento diplomático de esta envergadura.

Sin embargo, el primer ministro checo, Andrej Babis, se opuso a la intención del jefe de estado a una reubicación de la embajada, argumentando que no quiere romper con la política de la UE, que se opone a reconocer a Jerusalén como la capital de Israel hasta que no se defina por medio de negociaciones finales entre israelíes y palestinos.

Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío