Enlace Judío – Según las cifras palestinas, un total de 115 han muerto desde el inicio de las protestas iniciadas a finales del mes de marzo, que alcanzaron su punto máximo el 14 de mayo, en víspera del Día de la Nakba.

Un artefacto explosivo fue arrojado contra las tropas de las FDI al norte de la frontera entre Gaza e Israel, durante la manifestación masiva que tomó lugar este viernes en el enclave palestino.

Las FDI aclararon que ningún soldado resultó herido por este ataque.

Sólo alrededor de unos 1,600 palestinos se presentaron a las protestas de la llamada “Gran Marcha del Retorno” que ocurrieron en dos lugares a lo largo de la frontera, donde arrojaron piedras y quemaron neumáticos. Se hicieron numerosos intentos para dañar la infraestructura de seguridad, dijo el ejército. Se esperaba que las manifestaciones culminaran el pasado 15 de mayo, pero los líderes en Gaza han decidido continuar con ellas, pese a que desde el viernes pasado su intensidad y participación se redujo de manera considerable.

Las tropas usaron medios de dispersión antidisturbios y fuego vivo, aceptado este último como legal por la Corte Suprema de Israel en una decisión tomada ayer por el máximo órgano judicial del país.

El Ministerio de Salud de Gaza, dirigido por Hamás, dijo que 86 personas resultaron heridas durante la manifestación. La mayoría fueron tratados por inhalación de gas lacrimógeno mientras que algunos sufrieron heridas de bala.

También durante la tarde se lanzaron varias cometas incendiarias en dirección hacia Israel, provocando incendios. Los fuertes vientos obstaculizaron los esfuerzos para sofocar los incendios, aunque finalmente todos fueron controlados por las autoridades israelíes.

Este viernes de igual manera, el Ministerio de Salud gazatí comunicó que un joven palestino, Yasser Habib de 24 años, herido durante las manifestaciones de la semana pasada, murió.

Según las cifras palestinas, un total de 115 han muerto desde el inicio de las protestas semanales iniciadas a finales del mes de marzo, que alcanzaron su punto máximo el 14 de mayo, en víspera del Día de la Nakba, cuando un total de 61 personas murieron. Hamás admitió que 50 de los muertos de ese día eran sus miembros, mientras que la Yihad Islámica Palestina aseveró que tres de los asesinados pertenecían a sus filas.

A la par de las protestas, cerca de 87 mil palestinos de Cisjordania viajaron a la Ciudad Vieja de Jerusalén para rezar en la Mezquita de Al-Aqsa en el Monte del Templo, con motivo del mes de Ramadán. Cerca de 8 mil palestinos rezaron también en la Tumba de los Patriarcas en la ciudad de Hebrón, al sur de Cisjordania.

“Las tropas de las FDI están desplegadas en números reforzados y operan junto con el Shin Bet, la Administración Civil, la Policía Fronteriza y la Policía de Israel para permitir las oraciones de Ramadán, así como para defender comunidades y carreteras, y preservar el orden y la seguridad en el área”, comunicaron adicionalmente las FDI.

Los resultados de las manifestaciones de la “Gran Marchas del Retorno”, además de las fatales víctimas palestinas, han provocado una crisis entre Turquía e Israel, y otro intento del liderazgo palestino en Ramallah de pedir a la Corte Penal Internacional que lleve al Estado judío ante el banquillo en La Haya.

Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío