Enlace Judío México – El Estado informó el jueves a la Corte Suprema de Justicia que concederá residencia temporal a unos 300 solicitantes de asilo de la región de Darfur, las montañas de Nuba y la región del Nilo Azul en Sudán.
La decisión responde a peticiones judiciales que exigen al Estado revisar las solicitudes de cientos de sudaneses de manera individual o les garantice un estatus humanitario especial como grupo.
El nuevo estatus será idéntico al de un individuo que ha sido reconocido como refugiado. Los migrantes tendrán derecho a trabajar en Israel y recibirán beneficios sociales. Además, se les permitirá regresar a Israel después de abandonar el país.
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Unos 2.500 migrantes de Darfur y las montañas de Nuba en Sudán están a la espera de recibir respuesta a sus solicitudes desde hace varios años. En 2018, las autoridades israelíes otorgaron protección legal a 500 solicitantes de asilo procedentes de Darfur.
El nuevo estatus se otorgará en 30 días, de acuerdo con criterios aún no determinados. En su respuesta a la petición, el Estado no especificó cómo se determinarán estos criterios y por qué decidió, por tercera vez, extender protección a un número reducido de personas y no a todos los habitantes de Darfur que residen en Israel.
El Estado especificó que la protección legal es “otra fase en el proceso para crear una política integral con respecto a la población de infiltrados y solicitantes de asilo que viven en Israel” y agregó que la decisión se tomó a la luz de que los solicitantes de asilo no serán deportados a un tercer país en contra de su voluntad, a raíz de la negativa de Uganda y Ruanda de aceptar a los migrantes procedentes de Israel.
En febrero, el Estado dijo a la Corte Suprema que cualquier decisión legal que se tome con respecto a la población de migrantes de Darfur se aplicará a los solicitantes de asilo de las montañas de Nuba y el Nilo Azul en Sudán, que fueron sometidos a genocidio.
En julio de 2017, Israel tomó la primera decisión de otorgar estatus humanitario a 200 migrantes de Darfur. El gobierno anterior, bajo el mandato del primer ministro Ehud Olmert, otorgó el estatus de refugiado a las primeras 600 personas de Darfur que ingresaron a Israel.
Unas 15.000 personas procedentes de Eritrea y Sudán solicitaron asilo en Israel desde 2013, pero según datos de la ONG para Migrantes y Refugiados, sólo diez eritreos y un sudanés recibieron protección legal.
Con información de Haaretz / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico
