Enlace Judío México – Esta semana se ha llevado a cabo un acercamiento estratégico en cuestiones de seguridad entre Israel y Rusia, al tenor de las declaraciones del canciller ruso que apuntaron hacia la eventual salida de tropas extranjeras de Siria.

Israel está en “avanzadas pláticas” con Rusia sobre un posible retiro de las fuerzas iraníes de Siria, informó este jueves el noticiero israelí Hadashot.

Fuentes diplomáticas en Jerusalén dijeron al programa que las conversaciones con Rusia, realizadas con el respaldo de EE.UU., van en la dirección correcta. Una fuente diplomática israelí dijo a Hadashot, “Incluso si lleva tiempo e incluso si tenemos que aceptar que [el presidente sirio Bashar] Al-Assad vuelva, al final de estas conversaciones se terminará la amenaza iraní en Siria”.

El reporte señaló también que Israel estaría de acuerdo con tal realidad con las condiciones, incluida una reafirmación del acuerdo de armisticio de 1974 entre Israel y Siria, y garantías de que los funcionarios iraníes no entren de manera subrepticia de nuevo a territorio sirio.

La emisora ​​pública Kan informó también en un reporte que Israel estaba exigiendo que se prohibiera a las tropas de Teherán acercarse a más de 70 u 80 kilómetros de la frontera. La demanda fue supuestamente hecha durante las conversaciones entre Israel y Rusia. Según el informe, la retirada de las fuerzas armadas de Irán más allá de la carretera Damasco-Sweida es una demanda para finalmente sacar a todas las fuerzas de Teherán del país. Pero, según los informes, Israel también ha subrayado que, más importante que la distancia de las fuerzas desde la frontera, es saber en qué consisten sus actividades.

Por otra parte, un informe del Canal 10 dijo el jueves que un alto funcionario israelí ha dicho explícitamente que el país no objetará que Assad permanezca en el poder, siempre y cuando se elimine la presencia de Irán en Siria. Presuntamente, el consejero de Seguridad Nacional del gobierno israelí, Meir Ben-Shabbat, hizo el comentario a su homólogo francés, Philippe Etienne, quien visitó brevemente Jerusalén el domingo para preparar la reunión del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, el próximo martes en París con el presidente francés, Emmanuel Macron.

Los reportes se publicaron poco después de que hoy Netanyahu discutiera la situación en Siria en una llamada telefónica con el presidente ruso Vladimir Putin, y del encuentro del ministro de Defensa de Israel, Avigdor Lieberman, con su homólogo ruso, Serguei Shoigu.

Al tenor de esto, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, organización opositora al régimen de Bashar Al-Assad y con sede en Londres, reportó que los asesores iraníes y los combatientes de Hezbolá establecidos en la zona fronteriza de Siria con Israel, estarían por retirarse de la zona. Sin embargo, un funcionario iraní establecido en Siria negó el informe y dijo que era “falso”, de acuerdo a la agencia AFP.

Los medios de comunicación rusos informaron recientemente que Moscú quiere cerrar un acuerdo que permita el despliegue de la policía militar rusa en las áreas cercanas a Israel. El acuerdo preveía la retirada de todas las fuerzas iraníes del área y exigiría a los rebeldes sirios que entreguen armas pesadas.

Esta semana se ha llevado a cabo un acercamiento estratégico en cuestiones de seguridad entre Israel y Rusia, al tenor de las declaraciones del canciller ruso que apuntaron hacia la eventual salida de tropas extranjeras de Siria.

Serguéi Lavrov dijo el miércoles que todas las fuerzas extranjeras deberían de retirarse de la frontera sur de Siria con Israel cuanto antes, informó la agencia de noticias TASS, y un par de días antes, había señalado que sólo las tropas del gobierno sirio deberían permanecer en la frontera sur del país, que está cerca de Jordania e Israel, informó la agencia de noticias RIA.

El cambio en la posición de Rusia se ha hecho más evidente desde el enfrentamiento militar de Israel con Irán en Siria el pasado 10 de mayo, cuando la “Fuerza Al-Quds” de Irán lanzó misiles contra la región israelí del Golán, ante lo cual, las FDI respondieron lanzando la “Operación Castillo de Naipes”, que arremetió un duro golpe a sitios estratégicos iraníes en el territorio sirio. Ante una eventual escalada en el sur entre Israel e Irán, Moscú temería que las ganancias que ha obtenido el régimen de Damasco frente a la oposición rebelde gracias a su ayuda, puedan salirse de control y desestabilizarlo, de acuerdo al portal The Times of Israel.

Bajo un presunto acuerdo reportado por Hadashot a inicios de la semana, Israel aceptaría el retorno de los soldados del régimen sirio a la frontera en los Altos del Golán, a cambio de que Rusia garantice que no haya fuerzas iraníes o de Hezbolá en el área, según el informe.

Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico