Enlace Judío México.- Tishá B’Av es el día de duelo nacional del pueblo judío. Por eso, durante Tishá B’Av nos conducimos como si estuviéramos llorando por un ser querido que acaba de fallecer. Para expresar, y llegar, a este estado emocional de dolor durante el día de Tishá B’Av ayunamos y evitamos participar de actividades asociadas con placer físico o alegría. Y también (y esto es menos conocido), evitamos todo aquello que nos distraiga del estado de ánimo de pesadumbre, apropiado para un doliente.

RAB YOSEF BITTON

Algunos ejemplos

AYUNO: Tishá B’Av es un día de ayuno, de noche a noche. Este año, 2018, observaremos el ayuno desde el sábado 21 de julio a la noche hasta el domingo 22 de julio a la noche (ver aquí los horarios exactos para su ciudad de residencia).

REJITSA (Lavado): Igual que en Yom Kipur, tomar una ducha, o bañarnos o lavarnos por placer está prohibido en Tishá B’Av. Sin embargo, si una parte de nuestro cuerpo se ensució, podemos lavarlo. Se permite el uso de toallitas húmedas de bebé (wipes) para limpiar el rostro, los ojos, las manos, etc., porque este tipo de limpieza no se considera “lavado”. Técnicamente podríamos lavarnos las manos normalmente por la mañana para Netilat Yadayim, porque lo hacemos para cumplir una Mitzvá y no por placer. De todas maneras, la costumbre Sefaradí es lavarnos sólo los dedos para Netilat Yadayim.

SIJA (Uso de cremas) Utilizar cremas o ungüentos por placer o comodidad no está permitido durante Tishá B’Av. Se permite usar cremas o ungüentos de prescripción médica.

NE’ILAT HASANDAL (usar zapatos de cuero) Los zapatos de cuero se consideran un artículo de lujo (calzado de vestir). Y como estamos de duelo, durante Tishá B’Av, no calzamos zapatos de cuero. Podemos usar zapatillas de tela u otro tipo de calzado de plástico, etc. Otros artículos de cuero, como un cinturón o una Kipá de cuero están permitidos.

TASHMISH HAMITA (Intimidad) La relaciones íntimas se suspenden en Tishá B’Av. Si la noche del Mikve cae en la noche de Tishá B’Av, es decir, el Sábado 21 de julio por la noche, el Mikve tiene que ser postergado para la noche siguiente.

LIMUD TORA: En Tishá B’Av nos abstenemos de estudiar Torá, porque estudiar Torá es una actividad placentera. Podemos leer y estudiar libros o textos conectados con tribulaciones o pesar, como el libro de Iyob (Job) o Ejá, o algunos pasajes del libro de Yrmiyahu o algún Salmos de Tehiim (por ejemplo, 44), masejet mo’ed qatán, etc.

TRABAJO: En Tishá B’Av no se recomienda trabajar porque el trabajo distrae nuestra atención del duelo. Abstenerse de trabajar en Tishá B’Av, sin embargo, no es una prohibición formal, sino más bien una tradición que algunas comunidades han adoptado y otras no (minhag hamaqom). La decisión de trabajar o no trabajar durante Tishá B’Av también dependerá de la situación financiera o profesional de cada individuo. En cualquier caso, si por no trabajar en Tishá B’Av uno incurriera en pérdidas económicas significativas o arriesgaría su puesto de trabajo, se le permite seguir trabajando durante Tishá B’Av.

TEFILIN: En Yerushalayim los Sefaradim acostumbran a usar Talit y Tefilin normalmente durante la mañana de Tishá B’Av. Sin embargo, en la mayoría de las comunidades de la diáspora, tanto Sefaradim como Ashkenazim, se acostumbran a no usar Tefilín por la mañana, ya que el Tefilín es una señal de honor y distinción: una corona (pe-er) en nuestra cabeza, que declara que somos el pueblo elegido por Dios. En la mayoría de las comunidades se viste el Talit y el Tefilín a la tarde para Minha. En algunas comunidades la tradición es que antes de ir a la Sinagoga uno se pone el Talit y Tefilin en casa, dice Qaddesh Li y Shemá Israel y luego va a rezar a la Sinagoga.

SHE-ELAT SHALOM: En Tishá B’Av no saludamos a amigos y compañeros como de costumbre, ya que nuestro estado de ánimo es, o debería ser, el estado de ánimo de un doliente. Si alguien sin querer o sin saber nos saluda, podemos reconocer el saludo con un gesto discreto.

SENTARSE EN EL SUELO: La costumbre general es que durante la lectura de la Meguilat Ejá la gente no se sienta en los bancos de la sinagoga, sino en el suelo, al igual que lo hacen los dolientes durante el shib’a (los primeros siete días de duelo judío). La costumbre Sefaradí es que en la noche de Tishá B’Av, sábado por la noche, se apagan las luces de la sinagoga, se enciende solo una vela, todos se sientan en el suelo y literalmente lloran contado cuantos días han pasado desde la destrucción de nuestro segundo Bet Hamikdash. Este año contaremos 1950 años, ya que según nuestra tradición el Bet Hamikqdash se destruyó en el año 68 de la era común (en hebreo חיים).

 

 

 

Fuente:halajá.org