(JTA) — Un municipio holandés rechazó el plan de un empresario turco de transformar una sinagoga de 125 años en un restaurante.

El ayuntamiento de Deventer, en el este de los Países Bajos, consideró la semana pasada que el plan “es inconsistente con el carácter del edificio”, una decisión que bloqueó las intenciones del desarrollador Ayhan Sahin de convertir la gran sinagoga de estilo neo-morisco en un restaurante, reportó el sitio Joods.nl. El empresario compró el edificio en enero.

Tom Fürstenberg, presidente de la comunidad judía Beth Shoshanna de Deventer, formada por varias docenas de miembros, dijo que se sentía “aliviado” tras la decisión. En abril, le había dicho al periódico regional De Stentor que sería “escandaloso” si el municipio aprobaba los planes de Sahin.

Fürstenberg también dijo que el plan iba en contra de los acuerdos hechos con Sahin. La comunidad judía esperaba poder seguir utilizando el establecimiento con fines religiosos bajo el nuevo propietario.

En los últimos años, la pequeña comunidad judía de Deventer ya no podía mantener el gran edificio, el cual se encuentra enlistado como un monumento nacional. Fue vendido a una iglesia local, que lo vendió a Sahin por una cantidad no revelada, según el reporte.

A lo largo de toda Holanda, organizaciones sin fines de lucro y las municipalidades han tomado las sinagogas en ciudades sin comunidades judías para convertirlas a veces en museos populares, como en Groningen.

En 1940, en los días posteriores a la invasión alemana de los Países Bajos, miembros del Partido Nacional Socialista holandés saquearon la sinagoga de Deventer, mientras la policía se abstenía de actuar, destruyendo sus interiores.

En 1943, Deventer no tenía residentes judíos registrados. La gran mayoría de ellos fueron asesinados en campos de exterminio nazis. El interior fue restaurado después de la Segunda Guerra Mundial.

Sahin dijo a De Stentor que su plan para convertir la sinagoga en un restaurante “es muy interesante y que atraería a mucha gente de fuera” de la ciudad de Deventer.

También dijo que lamentaba haber escuchado que la comunidad judía local carecería de espacio para rendir culto si se aprobaba el plan, pero agregó que él “no es el Ejército de Salvación”. Además dijo que estaría dispuesto a permitir que la comunidad siguiera usando el edificio si pagaban una “renta completa” por ello.

Se están llevando a cabo negociaciones entre Sahin, la ciudad, la comunidad judía y otras partes para encontrar una solución que permita a la comunidad continuar utilizando la sinagoga para fines religiosos.

De la traducción (c)Enlace Judío México
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