(JTA) — La campaña de Boicot, Desinversión y Sanciones contra Israel ha sido categorizada como antisemita por la Oficina del Estado de Berlín para la Protección de la Constitución.
En su informe anual de 2017, publicado la semana pasada, la oficina, que supervisa las actividades antidemocráticas en todo el espectro político en Berlín, describe la campaña de BDS como un movimiento vagamente organizado, del cual algunos segmentos “cuestionan el derecho de Israel a existir y acusan de racismo por completo a Israel”.
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El informe “se refiere a una zona gris” entre la “crítica legítima de la política israelí, del antisemitismo antisionista” y basa su comprensión del antisemitismo en la definición de trabajo propuesta por el Grupo de expertos independientes sobre el antisemitismo del Bundestag alemán, adoptada en abril pasado.
Esto se produce casi exactamente un año después de que el alcalde de Berlín, Michael Müller, se uniera a Josef Schuster, jefe del Consejo Central de Judíos en Alemania, para anunciar planes para bloquear el uso de los lugares de la ciudad y fondos para eventos de grupos que apoyen al movimiento de boicot contra Israel.
Berlín se convirtió en la tercera ciudad, después de Múnich y Fráncfort, en declarar planes para obstaculizar tales actividades.
