Enlace Judío México e Israel – El asesor de seguridad de Donald Trump, John Bolton, advirtió que EE.UU. no cooperará de ninguna manera con la Corte Penal Internacional (CPI) y advirtió de posibles sanciones.
Bolton además tachó a la CPI como un organismo burocrático e irresponsable que va en contra de la Constitución de los EE.UU. y es “antitético a los ideales de nuestra nación”.
En el primer discurso de Bolton como asesor de seguridad nacional este lunes, Bolton argumentó que la autoridad de la CPI no es válida, socava la soberanía estadounidense y concentra el poder en manos de una autoridad sin control de una manera que es “antitética a los ideales de nuestra nación”.
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El discurso de Bolton ocurre después de que el fiscal de la CPI solicitó en noviembre del año pasado que se investigaran los delitos presuntamente cometidos por miembros del ejército de los EE.UU. que sirvieron en Afganistán. Bolton dijo que las posiciones del fiscal eran falsas e injustificadas.
“Hoy, en la víspera del 11 de septiembre, quiero entregar un mensaje claro e inequívoco en nombre del Presidente de los EE.UU.”, dijo Bolton. “EE.UU. utilizará todos los medios necesarios para proteger a nuestros ciudadanos y los de nuestros aliados de un enjuiciamiento injusto por este tribunal ilegítimo. No cooperaremos con la CPI”, dijo Bolton.
“No brindaremos asistencia a la CPI. Y ciertamente no nos uniremos a la CPI. Dejaremos que el ICC muera por sí solo. Después de todo, para todos los efectos, la CPI ya está muerta para nosotros”, añadió.
“En teoría, la CPI responsabiliza a los perpetradores de las atrocidades más flagrantes de sus crímenes, les brinda justicia a las víctimas y disuade de futuros abusos”, dijo Bolton. “En la práctica, sin embargo, la Corte ha sido ineficaz, inexplicable y, de hecho, abiertamente peligrosa. Además, el objetivo en gran parte tácito, pero siempre central, de sus partidarios más enérgicos, fue constreñir a EE.UU. El objetivo no se limitó a apuntar a los miembros individuales del servicio de EE.UU., sino a los líderes políticos superiores de EE.UU., y su implacable determinación de mantener a nuestro país seguro”.
“Si la CPI se lanza contra nosotros, Israel o cualquier otro aliado, no nos quedaremos en silencio”, dijo enumerando una serie de posibles acciones, desde retirar la ayuda financiera hasta prohibir la entrada de jueces al país. “Responderemos contra la CPI y su personal en la medida permitida por la ley de los EE.UU.”, aclaró.
“EE.UU. siempre apoyará a nuestro amigo y aliado, Israel”, dijo. “Y hoy, reflejando las preocupaciones del Congreso con los intentos palestinos de impulsar una investigación de la CPI de Israel, el Departamento de Estado anunciará el cierre de la oficina de la Organización de Liberación de Palestina aquí en Washington, D.C.”.
Además de este argumento señalado por Bolton, el Departamento de Estado dijo este lunes en un comunicado oficial que, “después de una revisión cuidadosa”, el gobierno de Trump decidió cerrar la oficina de la OLP dado que esta “no ha tomado los pasos para avanzar el inicio de negociaciones directas y significativas con Israel” desde el pasado mes de noviembre de 2017, cuando renovó el permiso para que la oficina opere en EE.UU.
La administración asegura que en vez de ello, la OLP se enfocado en condenar el plan propuesto por Trump para resolver el conflicto palestino israelí sin que ni siquiera este se haya presentado, y que se han negado a acercarse a los norteamericanos con respecto a este esfuerzo de paz.
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