Enlace Judío México e Israel.- Como diplomático de Estados Unidos, Peter Mulrean combatió los prejuicios contra Israel en la ONU; hoy, defiende su agencia contra los recortes draconianos a la UNRWA de su ex empleador.
RAPHAEL AHREN
Hace apenas unos años, Peter Mulrean defendía a Israel en lo que podría decirse que es uno de los entornos diplomáticos más hostiles para el estado judío.
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En 2013, como embajador adjunto de Estados Unidos ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra, elogió a Jerusalén por su “fuerte compromiso y trayectoria en la defensa de los derechos humanos, las libertades políticas y las libertades civiles“.
Hoy, Mulrean es un funcionario de alto rango en UNRWA, la agencia de la ONU que trata con refugiados palestinos, posiblemente la organización más odiada en Israel y que el gobierno de EE.UU. recientemente calificó de “irremediablemente defectuosa“.
Desde su oficina, justo enfrente de la sede de la ONU en Turtle Bay, Manhattan, Mulrean promueve a la agencia en el escenario internacional más grande del mundo.
El director de la Oficina de Representación de UNRWA en Nueva York condena los recientes recortes presupuestarios por parte de la administración de los Estados Unidos y rechaza apasionadamente el argumento frecuente de que la agencia perpetúa el problema de los refugiados palestinos y se opone a una solución realista al conflicto israelí-palestino.
Pero también mantiene las buenas cosas que solía decir sobre Israel en su posición anterior.
“En ambos casos, hacía mi trabajo. En ambos casos, siempre fui un firme creyente en las políticas que perseguía”, dijo a The Times of Israel durante una entrevista reciente realizada al margen de la Asamblea General de la ONU.
Mulrean, quien se desempeñó como embajador de Estados Unidos en Haití antes de renunciar al servicio exterior el año pasado después de tres décadas, dijo que “en muchas ocasiones salí en defensa de Israel en diferentes temas”. Por ejemplo, dijo, promovió la adhesión de Israel al Grupo de Europa Occidental y otros en el Consejo de Derechos Humanos en 2013.
Hasta ese momento, el estado judío no era admitido en ningún grupo regional en el consejo, simplemente porque el Grupo de Asia y el Pacífico no lo aceptaba.
“Eso era una injusticia. Israel no debía ser sido excluido como miembro de un grupo regional”, dijo Mulrean.
“No se trata de todo o nada. Visité Israel muchas veces. Israel es un país fascinante; tiene muchos de los atributos dinámicos de una democracia que son importantes, y nos gustaría ver que Israel triunfe“.
Al mismo tiempo, agregó, “También nos gustaría ver un lugar para los refugiados palestinos que continúan siendo refugiados durante todo este tiempo. Así como creía en el trabajo que estaba haciendo en ese momento, creo en el trabajo que estoy haciendo ahora. Creo que es una misión importante“.
Actualmente hay cinco millones de refugiados palestinos “que están en una situación muy difícil“, continuó Mulrean.
“Queremos ver también a estas personas avanzar. No somos una organización política, no tenemos una opinión sobre cómo debería ser la solución. Pero esperamos que llegue una solución política para que tanto israelíes como palestinos puedan llevarse bien y seguir adelante con sus vidas“.
Naturalmente, Mulrean quedó consternado ante la decisión de EE.UU. a fines de agosto de retirar toda la financiación a la UNRWA, cuando su ex empleador reprendió su nuevo lugar de trabajo “como una comunidad de beneficiarios con derechos permanentemente en expansión de forma ilimitada y exponencial”, y su modelo empresarial “simplemente insostenible“.
Los recortes de Estados Unidos “nos vinieron de forma inesperada“, dijo, y señaló que altos funcionarios de la Casa Blanca y del Departamento de Estado habían expresado su “satisfacción” con la agencia en las reuniones celebradas en Washington hace unos meses.
Lo que tenemos que concluir es que fue una decisión política, lo que es profundamente preocupante porque significa politizar la asistencia humanitaria.
De hecho, el 7 de diciembre de 2017, UNRWA y EE.UU. firmaron un nuevo acuerdo de cooperación, en el que el gobierno dijo que estaba “comprometido a continuar su asociación con UNRWA para asistir a los refugiados registrados de UNRWA y otras personas que están bajo el mandato de UNRWA hasta que se logre un acuerdo de paz integral y duradero y finalice el mandato de UNRWA“.
Apenas unas semanas después, la administración anunció que solo daría $ 60 millones a la agencia en 2018, $ 300 millones menos de lo que había dado en años anteriores.
Luego, el 31 de agosto de este año, el Departamento de Estado anunció que “ya no estaba dispuesto a asumir la parte muy desproporcionada de la carga de los costos de UNRWA que habíamos asumido durante muchos años“.
“Lo que tenemos que deducir es que fue una decisión política, lo cual es profundamente preocupante porque significa que está politizando la asistencia humanitaria“, afirmó.
“Estados Unidos ha sido tradicionalmente no solo el contribuyente más generoso a la asistencia humanitaria, sino también uno de los más grandes defensores de los principios humanitarios, uno de los cuales es que toma sus decisiones en función de la necesidad y no de las agendas políticas“.
Durante la entrevista, Mulrean, un nativo de Boston de voz suave, enfatizó varias veces que UNRWA es una organización humanitaria que no adhiere a opiniones políticas, y no adopta ninguna posición en absoluto sobre cómo debería ser el futuro arreglo del conflicto israelí-palestino.
Al mismo tiempo, rechazó categóricamente las afirmaciones, a menudo hechas por partidarios de Israel, de que UNRWA es parte del problema, ya que otorga el estatus de refugiado a los descendientes de palestinos que abandonaron sus hogares inmediatamente después de la creación de Israel.
Los críticos argumentan que en lugar de tratar de reasentar a esas personas en sus actuales países de acogida, donde nacieron la mayoría de los que viven actualmente, UNRWA perpetúa el espíritu palestino de refugiados que algún día regresarán a sus hogares en lo que hoy es Israel.
Si UNRWA adoptara las mismas definiciones que aplica el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para determinar el estatus de los refugiados de otras partes del mundo, millones de palestinos perderían su estatus de refugiados, según los expertos.
Mulrean titubeó al comparar y contrastar cómo las diferentes agencias de la ONU definen quién es refugiado, pero se mostró en desacuerdo con la premisa de que los palestinos reciben un tratamiento excepcional.
“Parece que hay un gran malentendido sobre lo que hace UNRWA en términos de pasar el estatus a las generaciones, y lo que hace ACNUR. Porque ACNUR hace exactamente lo mismo”, insistió Mulrean. “Hay refugiados afganos, incluidos niños y nietos que han recibido la condición de refugiado“.
En “situaciones prolongadas” en todo el mundo, ACNUR entrega el estatus de refugiado de generación en generación, agregó el ex diplomático.
Incluso el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha dicho en repetidas ocasiones que no hay una diferencia sustancial entre la forma en que la ONU trata a los refugiados de diferentes áreas, dijo Mulrean. “Es esencialmente lo mismo“.
Mulrean reconoció que UNRWA, de manera única, trata con una sola población de refugiados, mientras que ACNUR está a cargo de todos los refugiados restantes del mundo. La razón de esta anomalía radica en el hecho de que la Asamblea General de la ONU en 1949 votó para crear UNRWA con el único objetivo de ayudar a los refugiados de Palestina, antes de que se fundara el ACNUR un año más tarde para tratar con otros refugiados, dijo.
Se esperaba que UNRWA operara “por un período temporal“, pero la Asamblea General ha renovado su mandato cada tres años desde entonces, explicó Mulrean. La agencia solo puede cerrarse o fusionarse con ACNUR, si se encuentra una mayoría para tal movimiento en la Asamblea General.
Mulrean agregó que el conflicto israelí-palestino continúa no por las definiciones de refugiados de UNRWA, sino porque los líderes de ambos lados todavía tienen que encontrar una solución política.
“No es que los refugiados quieran nacer refugiados, o quieran seguir siendo refugiados para siempre. Es la falta de una solución política lo que crea eso“, dijo.
“Rechazo completamente la idea de que es UNRWA quien perpetúa el problema de los refugiados. Es la falta de una solución política lo que perpetúa la situación de los refugiados”, declaró Mulrean. “UNRWA fue creado para brindar servicios a estos refugiados hasta que se encuentre una solución justa y duradera. Eso es lo que continuaremos haciendo hasta que la Asamblea General nos diga que hagamos lo contrario”.
Fuente: The Times of Israel / Traducción: Silvia Schnessel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico
