(JTA) – El propietario musulmán de la compañía de limusinas involucrado en un accidente en el estado de Nueva York que dejó a 20 personas muertas ayudó a descubrir ataques terroristas en dos sinagogas trabajando de manera encubierta para el FBI.
Shahed Hussain, un inmigrante paquistaní y hombre de negocios del área de Albany, propietario de la empresa Prestige Limousine, trabajaba camuflado para el FBI después de declararse culpable de un cargo de fraude federal por ayudar a alguien a obtener su licencia de conducir ilegalmente.
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El sábado, una de las limusinas de la compañía se saltó una señal de alto en una intersección en Schoharie, matando a los 18 ocupantes de la limusina y los dos que iban en el otro vehículo.
La limusina había fallado las inspecciones por problemas con sus frenos, suspensión y chasis el mes pasado, y el conductor no tenía la licencia adecuada para operar un vehículo comercial, informó The New York Times. El coche tampoco estaba certificado para llevar tanta gente.
Como parte de una operación encubierta del FBI en una mezquita en Newburgh, un suburbio al norte de la ciudad de Nueva York, Hussain, haciéndose pasar por un representante rico de una organización terrorista pakistaní, ayudó a condenar a cuatro hombres en un plan frustrado para atacar dos sinagogas y derribar aviones militares.
El papel de Hussain en el caso Newburgh fue tema de un documental de HBO.
Lee Kindlon, un abogado de Hussain y Prestige, le dijo a The Times que Hussain ha pasado un tiempo en Pakistán tratando problemas de salud. Dijo que su cliente estaría dispuesto a regresar a los Estados Unidos si la investigación de la limusina continúa.
De la traducción (c)Enlace Judío México
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