(JTA) — El sospechoso en el ataque a tiros en una sinagoga de Pittsburgh que dejó a 11 devotos muertos se declaró inocente en su comparecencia este jueves por la mañana en una sala de audiencias federales.

Robert Bowers también solicitó un juicio por jurado en el caso, que incluye 44 cargos, 32 de ellos castigados con la pena de muerte.

Bowers, con el brazo vendado, entró en la sala con un uniforme rojo de prisión y esposas. En una comparecencia ante el tribunal a principios de esta semana, usó una silla de ruedas.

El reportero Andy Sheehan de KDKA, afiliada a la cadena CBS, describió a Bowers, de 46 años, como “con un aspecto impenitente. Tal vez algo desafiante”.

Los cargos contra Bowers incluyen la obstrucción del libre ejercicio de creencias religiosas que resultan en la muerte y el uso de un arma de fuego para cometer un asesinato durante y en relación con un delito de violencia. También incluyen cargos federales por crímenes de odio.

Los fiscales federales están buscando la aprobación para conseguir la pena de muerte contra Bowers.

Bowers, quien está en la cárcel sin derecho fianza, enfrenta una pena de muerte o cadena perpetua sin libertad condicional, seguido de una sentencia de prisión consecutiva de 535 años.

De la traducción (c)Enlace Judío México
Prohibida su reproducción