Enlace Judío México e Israel – El presidente de la Knéset, Yuli Edelstein, dijo el domingo que el asesinato del ex primer ministro Yitzhak Rabin “carece de influencia histórica”. En una entrevista a la Radio del Ejército, Edelstein dijo que si el asesinato “logró sus objetivos, fueron opuestos a lo que el abominable asesino pretendía lograr”.

JONATHAN LIS

“Cuando hablan de que el asesinato político fue muy exitoso, que Yigal Amir tuvo éxito en su misión, ¿qué es eso, si no alentar la violencia política?”, dijo en referencia a las declaraciones de la presidenta de Meretz en la ceremonia para conmemorar el 23 aniversario del asesinato.

“Espero que llegue el día, y no esté muy lejos, en que comprendamos que la única conclusión de todo lo que sucedió es que debemos mantenernos unidos, la derecha, la izquierda y el centro político, para no enturbiar las opiniones políticas, para continuar el discurso”.

“El asesinato del primer ministro Yitzhak Rabin fue una tragedia terrible para su familia y amigos, y tuvo un gran impacto sobre el Estado de Israel. En sus palabras, el presidente de la Knéset afirmó que el repugnante asesinato no ayudó a Yigal Amir a alcanzar el resultado político que esperaba. Por el contrario, en su acto prolongó los días de los Acuerdos de Oslo, que estaban destinados al fracaso desde un principio”, dijo la oficina de Edelstein en un comunicado publicado tras la entrevista.

En respuesta a la declaración, la presidenta de Meretz, Tamar Zandberg, dijo: “El asesinato de Rabin desvió a Israel de su curso y detuvo el proceso de paz. Ese era su objetivo, y en eso tuvo éxito. Cualquier intento de negarlo es parte de la evasión y de “no asumir la responsabilidad por el ambiente que llevó al asesinato. La respuesta de Edelstein deshonra su majestuoso papel y demuestra que no sólo entonces, sino también ahora, la derecha no ha aprendido y nada ha cambiado”.

El sábado por la noche, Zandberg se dirigió a la multitud en la Plaza Rabin y dijo que el asesinato del ex primer ministro fue “el mejor asesinato político de la historia”. Si el evento de esta noche no nos impulsa a actuar, Yigal Amir seguirá sonriendo un año más, dijo en referencia al asesino de Rabin.

“Cuando Netanyahu inició la ola de incitación en 1995, pensó que podía controlarla, pero hoy convirtió la incitación en una herramienta central para que el campamento de paz se mantenga sumiso, controlarlo y destrozarlo. Lo utiliza para asegurarse de que el legado de su asesinato permanezca intacto, es decir, que el legado de paz permanezca enterrado”, dijo.

En su intervención, la líder de la oposición Tzipi Livni (Unión Sionista) dijo: “La historia se repite. Basta con leer los mensajes del primer ministro, ver los videos, escuchar los discursos, leer los comentarios violentos que atacan a todo el que piensa de otra manera. Todo aquel que trabaja por la paz no es un traidor, era cierto entonces y es cierto ahora”.

Fuente: Haaretz / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico