Enlace Judío México e Israel.- Dentro de nuestros grupos de amigos de judíos mexicanos siempre existen los primeros en hacer todo y los últimos; en diferentes etapas de la vida. Obviamente estos momentos los vivimos de diferentes maneras. A continuación, algunos ejemplos de esto.

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Los primeros y los últimos en casarse.

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Cuando se compromete el primer integrante del grupo todos nos volvemos locos, hasta nos mandamos a hacer una camisa que dice “Best friend of the bride or groom”. Les hacemos una megafiesta, nos vamos de viaje a la pedida, a la despedida, al spa antes de la boda, vestimos a los novios, mandamos flores a casa de la mamá en el compromiso, hacemos despedida de soltera y gallo, nos quedamos en su boda hasta las 9:00 a.m., etc.

Cuando se comprometen los últimos amigos del grupo, la mitad de ellos no pueden tomar en la pedida ni despedida porque o están embarazadas o dando pecho, sí mandan flores y todo a casa de la mamá de la novia pero ya no van a la vestida, pues tienen que acostar a sus hijos antes de la boda, no aguantan quedarse hasta el final de la boda (pues ya no es como si tuvieran 21, a los 35 ya no es igual). Y ojo, no es que no nos dé tanto gusto o los queramos menos… simplemente ya estamos más cansados.

Los primeros y los últimos en tener hijos.

Cuando la primera del grupito se embaraza todas se emocionan demasiado, hasta lloran con la noticia. Saben perfectamente bien en que semana va su amiga, cuándo ha subido de peso, cuándo es cada cita del doctor que tiene, diario le hablan a preguntar cómo se siente, hacen una quiniela sobre el sexo, peso, talla, etc. del bebé. Por lo regular le hacen una sesión de fotos embarazada con la panza pintada, un baby shower, 100 artículos con el nombre bordado del bebé, todas están en el hospital esperando a que nazca y hasta van toditas a la fiesta de un año de su sobrinito.

Cuando ya van en los últimos hijos del grupito de amigas, la emoción se baja pero la sabiduría incrementa. Ya no hacen quinielas, ni baby showers, ni sesiones de fotos con la panza pintada. Pero ahora todas tienen algo que opinar sobre cómo lo debería dormir, cómo es mejor bañarlo, que carriola debe de usar, etc. Además, hereda millones de ropa y juguetes de sus varios primos postizos; pues ya nace en una gran familia de todos los hijos de las amigas de su mamá.

 

 

 

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