Enlace Judío México e Israel – Con su experiencia en el campo que la ha impulsado a buscar conectar a la experiencia israelí con América Latina, Deborah Laks respondió el pasado jueves 8 de noviembre en las instalaciones de la Universidad Hebraica a preguntas como: ¿Cómo se forma una start-up? ¿Por qué llega a fallar una start-up? ¿Qué busca un inversionista en las start-ups? ¿Que volvió a Israel un campo de cultivo para las start-ups?

Una start-up nation se enfoca en crear empresas innovadoras que puedan adquirirse rápidamente, mientras que en una scale-up nation el enfoque es crear grandes y exitosas empresas multinacionales que operen a una escala verdaderamente global con miles de empleados e ingresos significativos.

Estas últimas se mantienen con un liderazgo profesional, manteniendo las expectativas de sus inversionistas y la cultura del “start-up”, es decir, antiburocrática, rápida y generando innovación.

¿Cómo llegó Israel a ser una potencia tecnológica? ¿Que lo volvió un campo de cultivo para las start-ups? La cultura y la educación son dos factores muy importantes para Laks, así como la tecnología, la innovación y el apoyo del gobierno. El sentido de superviviencia que tiene el país ante las hostilidades llevaron a una necesidad de innovar.

Los israelíes están muy expuestos a la tecnología desde jóvenes, ya que lidian con ella y deben de entenderla, por lo que se adaptan al cambio muy rápido, de acuerdo a Laks.

Además, los israelíes tienen una cultura comunitaria de apoyo mutuo muy fuerte. Es muy difícil comenzar una nueva compañía en el país sin este apoyo en Israel. Y no sólo eso, sino que piensan de manera global, y no local, respecto al alcance de su compañía, al ser Israel un país muy pequeño.

Antes, las grandes compañías llegaban a adquirir start-ups y estas desaparecían. Ahora, con el modelo del scale-up nation, las empresas adquieren hoy por hoy el talento y buscan entrar a otros mercados.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico