Enlace Judío México.- Uno más de nuestros lectores expone sus dudas acerca de sus apellidos a nuestro experto en genealogía judía.

Pregunta:

Hola, buen día.

¿Cómo podría iniciar una investigación que confirme mi ascendencia judía?

Mi madre me transmitió una información cuando era adolescente, acerca de nuestra historia de familia y de que mi abuelo, por parte de madre, de nombre Benjamín González Burgos, era judío sefardí.

¿Me pudieran ayudar a confirmar esto? Él nació en Cajamarca, Perú.

Cualquier información o dato de cómo proceder será bienvenido.

Muy atentamente,
Pía Cruzalegui
Chicago, USA

Respuesta de Alejandro Rubinstein:

González

Desde 1387 hay registros de haber habido portadores de este nombre de familia en la ciudad de León en España. Este apellido deriva del vocablo germano Gundisalv y que se refiere al combate, la lucha o la pelea.

La presencia de la partícula ez de manera de sufijo hace a este apelativo como uno de clasificación patronímica. Entre sus múltiples variantes y derivados se pueden citar Gundisálvez, Gonzalvo, Gonzalbo, Gondalo, Gozalo, Gozalvo, Gozalbo, Gozal, Gosálvez, Gonzálvez, Gonzáles, Gozálbez, Gosálbez, Golsálvez, Gozálvez,, Gosalves, Gozález, Gosálviz y Gonzáez.

Según el país en donde se acuñe es que su expresión gráfica varía, como es el caso de Portugal y Brasil en donde es Gonçalves, Y Gonález; Gonsález, Gunzáloz, Gonzzali y Gonzalves en México, mientras que en Estados Unidos se le conoce por Gonzalve, Gonzalz, Gonzarbo, Gonsales, Gonzoles y Gonzlez, sin olvidar a Gonzal en Filipinas.

En Italia se escribe como Consalvi y las múltiples derivaciones y alteraciones pudiesen ser resumidas en Conzalez, Consales, Monsabre, Monsalve, Monsanto y Gonzara.

Este nombre familiar es tan popular que se instaló entre los judíos de Middelburg; Amsterdam, Hamburgo, Livorno, Túnez, Gibraltar, Londres, Toledo, Badajoz, Francia y Ciudad de México. La inquisición persiguió a judíos y a judaizantes usuarios de este apellido en Toledo y en la Ciudad de México.

Se trata del apellido número 60 en las preferencias mundiales y el 128 en la zona de Cajamarca en Perú, lugar de asiento del antepasado de nuestra lectora.

Burgos

Visto que este apellido significa barrio, aldea o arrabal pues en latín se le expresa como burgus y que deriva del alemán burgs que en dicho idioma se refiere a una ciudad pequeña, aldea o fortaleza, es lógico indicar que aparezca como nombre de ciudades y villas en muchas zonas como lo son las de Granada, Álava, Orense, Lugo, La Coruña, León Zaragoza, Soria, Segovia y Valladolid.

En ánimo de precisión, el apellido en estudio proviene de la ciudad homónima al este de Castilla la Vieja, conocida mediante los vocablos latinos con los que la fundaron Auca Baugi.

Muchas son las lenguas que expresan, con variantes, a este nombre de familia como lo es el vasco con la fórmula Burgoa, el catalán con Burg, Burch, Burgés y Brugart. En Italia es Borgo, Borghetti, Borghese, Borgese y Burgisi. En Francia se le escribe Bourg, Dubourg, Bourgade, Bourget, Bourguet, Bourcard, Bourgneuf, Dubourvieux, Bourgeois y Bourgeix. En el Reino Unido y demás países de habla inglesa es Burg, Burgh, Burge, Burgess, Burger, Burges y en Alemania recae en las voces Burg, Burger, Burghart, Burkhardt y Burgmann.

El mapa judío hispánico anuncia que en Toledo en 1410 existían moradores con dicho étimo y que trascendió a lugares como Bragança, Amsterdam y Ciudad de México, siendo esta última urbe el sitio en donde fueron perseguidos algunos usuarios de este apellido por los infames procesos inquisitoriales.

1,502 es la posición que ocupa este nombre de familia entre el resto de apellidos en el mundo y en Cajamarca, Perú goza del lugar 259.

Judería de Cajamarca, Perú

La presencia judía en dicha zona sudamericana comienza con los fundadores del grupo Segundo Villanueva Correa (hoy Serubabel Zadkia) y su hermano Álvaro (hoy Mordejai Meir). Después de introducirse en el estudio de la Torá, decidieron abandonar el cristianismo y se unieron a un grupo evangelista denominado Adventista del Séptimo Día. Este movimiento lo abandonaron al encontrarse con discrepancias en los usos y normas que implican el cuidado del Shabat.

En 1958 se organizaron como Israel de Di-s y comenzaron a respetar con cuidado y amor las reglas y prácticas del Shabat, las tres festividades de peregrinación: Pésaj, Shavuot y Sucot, la cadencia y ritmo de la purificación de la mujer y la distinción entre los animales puros o impuros para la ingestión.

En 1967, se asentaron en la selva y formaron una nueva comunidad bajo el esquema del kibutz de Israel. Allí se dedicaron al estudio del judaísmo y a la observancia de la Torá. Vivieron bajo estas normas por un espacio de cuatro años hasta que decidieron viajar a Lima para conversar con el Rabino Benamú, autoridad espiritual de la Comunidad Sefaradita. Interesado por su caso, el rabino les obsequió libros que permitieron que estos osados fundadores profundizaran en sus conocimientos.

Finalmente, un grupo regresó a Cajamarca y otro se estableció en Trujillo. Esta última población resultaba ideal, ya que se aislaban de influencias negativas, logrando avanzar en sus estudios y en la práctica hasta erigir una sinagoga.

Al contactar a autoridades rabínicas en Israel, recibieron a un Beit Din (tribunal rabínico) en sus poblaciones con el fin de realizar conversión sincera, lo cual resultó en una experiencia exitosa que ha visto sus frutos en la presencia de muchos de estos judíos peruanos, conocidos como Bnei Moshé (hijos de Moisés), en la tierra de Israel en donde participan activamente en la vida diaria, en el ejército y en las casas de estudio conocidas como Yeshivot.