Enlace Judío México.- Al responder al anuncio sorpresa del Presidente Trump de una retirada de todas las fuerzas estadounidenses de Siria el miércoles, el primer ministro israelí Netanyahu emitió una breve declaración que contenía dos mensajes.

YAACOV LAPIN

“Esta es, por supuesto, una decisión estadounidense,” dijo, enfatizando que no es el lugar de Israel decir a su socio principal donde desplegar tropas. Este es un mensaje importante para enviar, ya que muestra el respeto que tenemos por las decisiones internas de Estados Unidos en el uso de la fuerza militar.

Oficialmente, Israel no debe tener parte en la discusión que está arreciando ahora entre el establishment de defensa estadounidense y Trump.

Al mismo tiempo, la declaración de Netanyahu no contuvo ningún elogio para la decisión. Esto refleja una preocupación real por parte de Israel acerca de como la salida estadounidense afectará al equilibrio de fuerza regional.

“Estudiaremos el plan, como será implementado, y, por supuesto, sus consecuencias para nosotros,” dijo el primer ministro. “En cualquier caso, tendremos cuidado de mantener la seguridad de Israel y de defendernos en esta área.”

Estos comentarios son difícilmente un apoyo cálido. La declaración de Netanyahu refleja una advertencia velada al actor regional tóxico que está a punto de beneficiarse más inmediatamente de la medida de Trump: Irán.

La República Islámica está trabajando duro para extender su influencia, satélites, armas, y terror a través del Medio Oriente. Su objetivo es crear una red de áreas bajo su control, llena de organizaciones armadas, fábricas de armas, y bases de misiles. Teherán quiere construir estos activos para poder más tarde usarlos para atacar a Israel, y para amenazar y extorsionar a los estados suníes moderados que se encuentran en el camino de su hegemonía regional.

La presencia de tropas estadounidenses en el este de Siria sigue siendo una “barricada” a los planes iraníes para infiltrarse desde Irak.

El régimen iraní y su Guardia Revolucionaria Islámica desean un corredor terrestre que se extienda desde Irán a través de Irak, Siria, y Líbano. El control de tal corredor permitiría a Irán mover armas, milicias chiíes, y formaciones militares iraníes del este dentro de Siria, amenazando a Israel y Jordania por igual.

La seriedad de la amenaza fue reflejada en un ataque aéreo el 16 de julio de este año, atribuido a Israel por los informes de los medios internacionales. Ese ataque tomó como blanco a fuerzas iraníes que parecían estar construyendo tal corredor terrestre. El ataque, contra una villa sobre la frontera sirio-iraquí, resultó según se informa en un alto número de víctimas entre miembros de las milicias chiíes iraquíes y oficiales iraníes.

Según informes adicionales, Irán también ha mudado misiles balísticos a Irak, colocándolos bajo la vigilancia de milicias chiíes, lo que ha llevado a especulaciones que Israel puede lanzar ataques contra intereses iraníes en Irak.

En agosto de este año, una milicia chií en Irak afirmó que drones hostiles atacaron sus plantas de almacenamiento en un ataque aéreo, aunque ellos no identificaron al atacante.

El General de Brigada Yosi Kuperwasser, exjefe de la División de Investigación en la Inteligencia Militar de las Fuerzas de Defensa de Israel, dijo, “Si las fuerzas [estadounidenses] en el sur abandonan el área, significará que las fuerzas de Alasad y los iraníes tendrán control total sobre Siria. Esto significaría que ellos pueden tratar de enviar armas desde Irán a través de Irak a Siria, y luego a Líbano, y no va a haber nada en medio para detenerlos … allí radica el problema.”

Kuperwasser se estaba refiriendo a las fuerzas especiales estadounidenses con base cerca de Tanaf, que está cerca de las fronteras de Siria, Irak, y Jordania. Las fuerzas estadounidenses están también estacionadas más al norte, cerca de la frontera turca, donde trabajan con unidades kurdas.

Kuperwasser, quien se desempeñó también como director general del Ministerio de Asuntos Internacionales y Estrategia, agregó, “Es cierto que la misión original, de librarse de las fuerzas del ISIS fue más o menos lograda. Pero la cuestión era si tener aun tropas estadounidenses en Siria para cuidar la cuestión iraní o no.”

Cuando se le preguntó si Teherán será envalentonado por la medida, Kuperwasser respondió que “los iraníes van a ser empoderados y se sentirán mucho más fuertes,” agregando, “no está totalmente claro que el Estado Islámico no pueda resurgir, sacando ventaja de sus adversarios en esta área, y pueden surgir nuevamente.”

Israel, explicó él, tomará cualquier medida que estime necesaria para defenderse y nunca esperó que Estados Unidos la proteja con fuerzas.

‘Es una situación muy inestable’

“La cuestión es que tenemos un enemigo en común,” dijo Kuperwasser, respecto al tema de las tropas estadounidenses en el terreno en Siria. “El propósito de las fuerzas estadounidenses en Siria fue actuar contra esos enemigos en común – el Estado Islámico, [que son] suníes ultra-radicales; y en segundo lugar, los chiíes ultra-radicales, los iraníes. La presencia estadounidense allí fue un gran impedimento en el camino de los iraníes, quienes trataron de convertir a toda Siria en un territorio de control para ellos. Alejando a las fuerzas, hará más fácil a los iraníes controlar Siria por completo. Esto no es algo en lo que Israel tenga voz. Depende de los estadounidenses determinar su rol.”

Rusia, que ha surgido como un competidor aciago de Estados Unidos en la región, estará “muy satisfecho” por la decisión de Trump, destacó Kuperwasser, y “tendrá más mano libre para controlar lo que está sucediendo en Siria.” En verdad, poco después del anuncio de Trump, el presidente ruso Vladimir Putin dio la bienvenida a la medida, llamándola “la decisión correcta.”

Kuperwasser señaló que Rusia ha sido incapaz de mantener a Irán lejos del sur de Siria, a pesar de promesas en contrario. “Ellos fingen preocuparse por la preocupación de Israel. En el sur [de Siria], acaban de anunciar nuevamente [que se las habían] arreglado para mantener a las fuerzas iraníes más lejos de la frontera sirio-israelí, a 100 kilómetros de distancia,” dijo él.

“Pero el hecho es que las fuerzas sirias desplegadas en los Altos del Golán no son

totalmente sirias. Algunas de ellas son de hecho fuerzas que están subordinadas al mando iraní y de Hizbalá. Aunque tienen una identidad siria, reciben de hecho órdenes de los iraníes y Hizbalá. Esta es una situación por la que estamos muy preocupados, y no pienso que los rusos estén haciendo lo suficiente para asegurar que esto no suceda,” advirtió Kuperwasser.

Rusia, sin embargo, ha aumentado los esfuerzos para convencer a los iraníes de no ingresar armas en Siria. Si Rusia puede reducir consistentemente el tráfico de armas de Irán, ayudaría a estabilizar la región, argumentó.

Pero, él advirtió, “es una situación muy inestable, y tendremos que esperar y ver si los iraníes realmente se comportarán en una forma que mantenga la estabilidad y calma en Siria, y como una extensión, si convierten a Líbano en un área inestable.”

Los recientes túneles de Hizbalá descubiertos por las FDI, y los intentos por parte de Irán de construir sitios de misiles de precisión en Líbano, son ejemplos de acciones que desestabilizan la región.

Quedando muchos signos de interrogación, una cosa parece ser clara luego del anuncio de Trump: Rusia solidificará su control sobre Siria, y la relación de Moscú con Israel será aún más importante debido al vacío dejado atrás por Trump en la región.

Kuperwasser ofreció una fórmula simple para entender la dinámica de la relación de Israel con Rusia.

“Los rusos no quieren terminar enfrentando a la aviación israelí en Siria,” dijo él. “La forma de evitarlo es asegurar que los iraníes no lleven armas a través de Siria porque Israel no tolerará ese envío. La mejor forma de evitar la fricción es simplemente convencer a los iraníes de no ingresar armas.”

Esta es una versión editada de un artículo que fue publicado en JNS el 20 de diciembre del 2018.

Yaakov Lapin es un Asociado Investigador en el Begin-Sadat Center for Strategic Studies. El se especializa en el establishment de defensa de Israel, asuntos militares, y el ambiente estratégico meso-oriental.