Cumbre de líderes húngaro, polaco, checo y eslovaco con Netanyahu en Jerusalén

Enlace Judío México e Israel.- El primer ministro Benjamin Netanyahu ha forjado vínculos con los países de Europa central que se consideran más simpatizantes de la lucha de Israel.

HERB KEINON

Los líderes de los llamados estados de Visegrad, el primer ministro húngaro Viktor Orban, el primer ministro polaco Mateusz Miorawiecki, el primer ministro checo Andrej Babis y el primer ministro eslovaco Peter Pellegrini, se reunirán en Jerusalén del 18 al 19 de febrero para una cumbre que reforzará las relaciones de Israel con estos países y tendrán más impacto en el consenso de la UE sobre temas de Medio Oriente.

El Grupo Visegrad es considerado el más derechista de los países que conforman la UE de 28 estados, y es una de las subalianzas que el Primer Ministro Benjamin Netanyahu está desarrollando en la UE para neutralizar lo que considera un prejuicio antiisraelí de Bruselas.

Las otras subalianzas que ha forjado han sido con Grecia y Chipre, con los países bálticos (Lituania, Letonia y Estonia) y con el Grupo Craiova de países balcánicos: Bulgaria, Rumania, Serbia y Grecia. Serbia, aunque actualmente no es un estado miembro de la UE, es un país candidato para la admisión.

Netanyahu asistió a la última cumbre de los primeros ministros de Visegrad en Budapest en 2017.

Netanyahu celebra cumbres regulares con el primer ministro griego, Alexis Tsipras, y el presidente chipriota, Nicos Anastasiades, y el año pasado asistió a las cumbres tanto del Grupo Craiova como de los países bálticos.

Antes de volar a Varna en noviembre para una reunión del Grupo Craiova, que lleva el nombre de la ciudad rumana donde se reunieron por primera vez los líderes de los cuatro países, Netanyahu explicó esta política de “subalianzas” y dijo que se estaba reuniendo con los jefes de esos países porque quiere su ayuda para cambiar “el enfoque hipócrita y hostil de la UE” hacia Israel.

“Es un proceso que tomará tiempo, pero creo en establecer una meta y ponerla en marcha sistemáticamente para lograrla, y creo que esto es algo que lograremos con el tiempo“, dijo.

Estos esfuerzos han dado sus frutos, ya que los países que comprenden estas diferentes agrupaciones a menudo defienden a Israel en varios foros de la UE. Por ejemplo, en mayo, algunos de estos países impidieron que la UE adoptara una resolución que habría condenado a Estados Unidos por mudar su embajada a Jerusalén.

En general, en los últimos dos años ha habido muchas menos declaraciones de la UE sobre Oriente Medio que en el pasado. La dificultad para llegar a un consenso sobre Israel dentro de la UE también se mostró en diciembre cuando, después de una reunión sobre Medio Oriente en el Consejo de Seguridad de la ONU, ocho países de la UE, que estaban en el consejo en ese momento, estarían en 2019, o habían estado en 2017, pusieron su nombre en una declaración de advertencia de fracaso si el tan esperado plan de paz de la Administración Trump no requería una solución de dos estados con Jerusalén como la capital de ambos estados.

Que esta declaración, que también fue firmada por Polonia, fue emitida por un grupo ad hoc de estados de la UE inmediatamente relacionados con el Consejo de Seguridad, y no en nombre de toda la UE, fue vista ampliamente en Jerusalén como un indicador de la dificultad actual para alcanzar un consenso sobre los señores de Medio Oriente dentro de la UE.

El primer ministro húngaro Orban estuvo en Israel en julio pasado. Esta será la primera visita de Morawiecki aquí, desde la polémica ley de Holocausto de Polonia, que habría impuesto penas de cárcel a las personas que sugirieran que Polonia fue cómplice de los crímenes nazis, sacudió los lazos entre los dos países el año pasado.

El líder de Yesh Atid, Yair Lapid, criticó a Netanyahu por organizar la cumbre, diciendo que incluye a un líder, Morawiecki, que aprobó una ley que “deshonró la memoria de las víctimas del Holocausto” y a otro, Orban, que publica contenido antisemita. Fue una referencia a la campaña de Orban contra el financiero nacido en Hungría George Soros.

“Esta es una pérdida de todo el orgullo nacional y nos causa daños en el ámbito internacional“, escribió Lapid en Twitter. “El primer ministro debe superar su ansia por las fotos de la campaña y cancelar [la cumbre]“.

La participación de Netanyahu en la cumbre de Visegrad en Budapest en 2017 es recordada por un momento de “micrófono caliente” en el que contó a sus interlocutores durante lo que aparentemente pensó que era una reunión a puerta cerrada, pero que fue captada por un micrófono abierto, de que las políticas de la UE hacia Israel eran “loca” y contraproducentes.

“Tenemos una situación peculiar: la Unión Europea es la única asociación de países en el mundo que condiciona las relaciones con Israel, que produce tecnología en todas las áreas, a condiciones políticas. Los únicos”, dijo. “Tenemos una relación especial con China, y no les importan los asuntos políticos“.

“Creo que es una locura. Creo que en realidad es una locura“, continuó Netanyahu. “No estoy hablando de mis intereses, los intereses de Israel. Estoy hablando de los intereses de Europa. No socaven al único país occidental europeo que defiende los valores europeos y los intereses europeos, y evita otra migración masiva a Europa. Dejen de atacar a Israel; empiecen a apoyar a Israel“.

En un desarrollo diplomático relacionado, el primer ministro lituano, Saulius Skvernelis, llegó el lunes para una visita de dos días. Tiene previsto reunirse con Netanyahu el martes por la tarde. Los dos se reunieron por última vez cuando Netanyahu asistió a una reunión en la cumbre de los líderes de los Estados bálticos en Vilnius en agosto.