Enlace Judío México e Israel.- El lunes, el primer ministro Benjamin Netanyahu anunció que Israel no extendería el mandato de TIPH, que debía renovarse a fines de mes.
La letra “T” en el acrónimo TIPH significa “Temporal”, pero la Presencia Internacional Temporal en Hebrón ha existido continuamente desde 1997.
Originalmente, TIPH se estableció en la tensa atmósfera que siguió a la despreciable masacre de los fieles musulmanes en febrero de 1994 en la Cueva de los Patriarcas por Baruch Goldstein, un residente de la cercana Kiryat Arba. Esa primera misión realmente fue temporal, que duró solo tres meses, desde mayo hasta agosto. En 1997, TIPH recibió el mandato de supervisar el cumplimiento del acuerdo que dividía a Hebrón como parte de los Acuerdos de Oslo. Alrededor del 80% de la ciudad, hogar de más de 220,000 palestinos, fue entregado a la Autoridad Palestina y se lo conoció como H-1, mientras que Israel mantuvo el control militar sobre el otro 20%, llamado H-2, donde residen unos 1,000 judíos rodeados de palestinos.
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Sus observadores, todos civiles, patrullan las calles con sus chalecos distintivos y producen informes que se centran en presuntos abusos israelíes contra los palestinos.
El lunes, el primer ministro Benjamin Netanyahu anunció que Israel no extendería el mandato de TIPH, que debía renovarse a fin de mes.
Dado que el grupo debía ser temporal, como su nombre indica, según el Acuerdo de Hebrón, se determinó que Israel y los palestinos tenían que renovar el mandato de la organización cada seis meses. Aunque nunca ha sido popular en Israel, y en particular ha sufrido malas relaciones con los residentes judíos de Hebron, hasta ahora el mandato de la organización de monitoreo ha sido renovado de forma rutinaria y regular.
Los 64 observadores civiles internacionales de TIPH, que operan junto a unos 13 miembros locales, provienen de Italia, Noruega, Suecia, Suiza y Turquía. La presencia de observadores turcos ha sido considerada particularmente absurda por los israelíes, quienes dicen que impide incluso la pretensión de objetividad.
“No permitiremos que una fuerza internacional actúe contra nosotros“, dijo Netanyahu en un comunicado a la prensa anunciando su decisión de expulsar a TIPH.
Hebrón es la segunda ciudad más santa del judaísmo, donde hubo presencia judía durante miles de años, hasta la masacre de judíos de 1929 por parte de sus vecinos árabes, mucho antes de que naciera el Estado de Israel, obligó a los miembros supervivientes de la comunidad judía a salir.
Según el propio sitio web de TIPH, su mandato incluye siete tareas:
“Promover con su presencia un sentimiento de seguridad a los palestinos de Hebrón;ayudar a promover la estabilidad y un ambiente apropiado que favorezca la mejora del bienestar de los palestinos de Hebrón y su desarrollo económico; observar la mejora de la paz y la prosperidad entre los palestinos; asistir en la promoción y ejecución de proyectos iniciados por los países donantes; fomentar el desarrollo económico y el crecimiento en Hebrón; proporcionar informes; y coordinar sus actividades con las autoridades israelíes y palestinas“.
El aumento de la presión para poner fin al mandato de TIPH provino de los líderes judíos en Judea y Samaria y de diputados de derecha, luego de la aparición en julio pasado de un video que mostraba a un miembro suizo de TIPH abofeteando a un niño judío de 10 años en la cara y un informe del Canal 12 TV Noticias el mismo mes muestra imágenes de la cámara de seguridad de un miembro del TIPH claramente identificable que golpea los neumáticos de un vehículo que pertenece a un residente judío de Hebrón.
El primer ministro convocó al jefe de TIPH, Einar Johnsen, a raíz de las imágenes; la organización condenó los incidentes y expulsó a los dos miembros del personal que habían sido filmados.
La semana pasada, poco antes de que Netanyahu anunciara la decisión de terminar el actual mandato de TIPH en Hebron, el ministro de Asuntos Estratégicos y Seguridad Pública, Guilad Erdan, le entregó un informe policial que afirmaba que los miembros de TIPH “creaban fricciones deliberadamente para justificar su alto salario“. Los palestinos condenaron la decisión, y algunos dijeron que temían una oleada de violencia judía sin la presencia de TIPH. Pero el grupo observador claramente se ha convertido en parte del problema en lugar de la solución. Su presencia no ha impedido los ataques letales de palestinos contra judíos en y cerca de la ciudad. Ha sido parte de un intento por internacionalizar el conflicto israelí-palestino.
Ahora depende de las fuerzas israelíes mantener la paz en Hebrón. Su trabajo será más fácil sin una presencia extranjera antagónica avivando las llamas.
Fuente: The Jerusalem Post – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico
