ENLACE JUDÍO : -Lasha de Sela, una cantante de cortísima existencia pero de profunda significación, para muchos un mito cultural de nuestra época.


La cantante Lasha de Sela, z´´l, nació para la mezcla caleidoscópica, empezando por sí misma: venida al mundo en  Big Indian, Nueva York, en 1972, cuando los hippies  hacían furor, fue hija de un méxicano , Alejandro Sela (el apellido significa roca en hebreo) y la nieta de la actriz judía Elena Karam (Elia Kazam, “América, América”) La abuela paterna fue Carmen de Obarrio, pianista de origen panameño afincada en California. Y de bisabuelo, a un libanés.

Lasha, que recibió nombre a la edad de cinco meses cuando su madre leía sobre el Tibet, creció durante diez años viajando a través de EE.UU. y México en un antiguo autobús de escuela reconvertido. Su madre tocaba el harpa y la flauta y esas fueron las primeras notas musicales que ella escuchó en el mundo. La madre también era su maestra, pues con el nomadismo hippie, Lasha no fue escolarizada. Y  la lengua madre era el inglés, aunque ambos padres hablaban español perfectamente. Lasha aprendió español cuando vivió durante ocho años en México, soñando que se casaba, a pesar de saberle en otro mundo, con Victor Jara.

A la edad de 13 años, sus padres se divorciaron y ella se va a vivir a San Francisco con su abuela la pianista. Empezó a cantar en una taberna griega de esa ciudad, donde posiblemente se enamoró de la cultura griega hasta el extremo de estudiar Historia de la Grecia Antigua en la universidad. Pero vió un documental sobre Billie Holiday y decidió que su papel en este mundo sería el de cantante.

Sus hermanas estudiaban en una escuela de circo en Montreal y un día de 1991 se fue a visitarlas. Y se quedó a vivir; para sobrevivir, cantababa por los bares, hasta que un día la descubrió un productor de una discográfica independiente. Al poco tiempo tenía su primer disco en la calle: “La LLorona” , una mezcla de canciones de sabor latino de los años ´30 y ´40, donde mezcló, de forma armónica, acrisolada, la música mexicana con el klezmer de los judíos, baladas arrebatadas, jazz , música gitana y música del Oriente Medio. Fue álbum de platino en poco tiempo, premiado en diferentes festivales, un éxito rotundo.

Fue entonces cuando empezó a tocar en la gira de la Feria de Lilith tanto por América como por Europa y durante años. Llegó así a Marsella, que la inspiró lo suficiente como para quedarse a escribir nuevas canciones. Será su segundo disco, The Living Road, en clara referencia a su más tierna infancia en aquel autobús familiar. En este álbum mezcló tres lenguas: inglés, francés y español. Porque ella en sí misma fue una mezcla de todo y para todos, en especial por los 17 países por los que hizo una gira, alternando con duetos con artistas de los más variados géneros. Su  videoclip de este disco fue premiadoocmo el mejor del año en discos de músicas del mundo.

En 2009 sacó en Montreal su tercer trabajo. Pero ese año es también en el que le diagnostican un cáncer de mama. Anula la gira internacional. Incluso abandona la composición de las canciones que le iba a dedicar a Víctor Jara. Tras 21 meses de fuerte lucha contra la maldita enfermedad , Lasha de Sela fallece el primer día del año de 2010.

 

 © enlace judío