Enlace Judío México e Israel – El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu respondió a los críticos que denunciaron su respaldo a un pacto de los partidos de derecha Habait Hayehudi y Otzmá Yehudit, cuyos miembros son partidarios del fallecido rabino racista Meir Kahana.

“Qué hipocresía y dobles estándares de la izquierda”, escribió Netanyahu en su página oficial de Facebook. “Denuncian un bloque de partidos de derecha, mientras que la izquierda ha puesto a islamistas extremistas en la Knéset para crear un bloque que supere a la derecha”.

“En 1999, Ehud Barak participó en una conferencia electoral con el incendiario jeque Ra’ad Salah, representantes del Partido Laborista y Meretz votaron por Azmi Bishara, espía de Hezbolá para que pudiera entrar a la Knéset y Herzog promovió un acuerdo con la Lista Árabe Conjunta y dijo que los diputados árabes podrían ser una adición al gobierno”.

Netanyahu se refería al entonces líder del Partido Laborista, Isaac Herzog, durante las elecciones de 2015, así como a la gira de Barak por la ciudad árabe de Umm al-Fahm de cara a las elecciones de 1999, acompañado por Salah, entonces alcalde de la ciudad. Barak sucedió a Netanyahu como primer ministro después de esas elecciones.

“Un pacto con partidos de derecha es inaceptable, pero actuar para agregar incitadores y espías contra Israel es legítimo. Es el colmo de lo absurdo”.

El primer ministro también se refirió a la diputada Shelly Yacimovich, quien dijo a Haaretz que había votado por Jadash, parte de la Lista Árabe Conjunta en las elecciones de 2015. Bishara era miembro de Jadash cuando se postuló para las elecciones de 1996 que tuvieron lugar más de una década antes de que el diputado árabe renunciara a la Knéset por sospechas de espionaje y huyera a Catar.

Netanyahu ha sido criticado en Israel y en el extranjero desde que forjó un acuerdo con el partido de derecha Habait Hayehudí para otorgarle las carteras de Educación y Vivienda a cambio de su unión con el partido extremista Otzmá Yehudit. Este sábado, dos miembros del Congreso atacaron al primer ministro israelí por promover la alianza.

El representante Jerry Nadler, un demócrata de Nueva York y presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes dijo a The Times of Israel que “la promoción e inclusión de un partido abiertamente racista es una traición a la democracia israelí y a los amigos y simpatizantes de Israel en todo el mundo. La legitimación de opiniones racistas es simplemente inaceptable”, apuntó.

Horas más tarde, el representante Ted Deutch, demócrata de Florida y presidente del subcomité del Medio Oriente y África del Norte en la Cámara de Representantes , hizo eco de una declaración de AIPAC y escribió: “Este partido racista y reprobable no debe ser legitimado. El odio de Otzmá Yehudit no refleja los valores centrales sobre los que se sustenta el Estado de Israel, y debe ser rechazado”.

Su condena se produce a raíz de una denuncia inusual del lobby pro israelí AIPAC, que expresó su apoyo a una declaración emitida por el Comité Judío Americano. El comentario del CJA, que se publicó el jueves, describió a Otzma Yehudit como “reprobable” y señaló que en el pasado, los grandes partidos en Israel se negaron a cooperar con tales fuerzas extremistas.

También el sábado, el presidente de Israel Beiteinu, Avigdor Lieberman, calificó la denuncia de AIPAC como una advertencia. En un evento cultural en Hadera, Lieberman dijo: “Indudablemente estamos hablando de la organización judía más importante del mundo, con un significado profundo … Cuando AIPAC responde de esta manera, es una bandera roja”.

Lieberman añadió que Otzmá Yehudit está “en los márgenes de la política israelí, y no sólo en lo que respecta a la política. Son más ultraortodoxos que Litzman, Gafni y Dery juntos”, en referencia a los miembros de los partidos ultraortodoxos Judaísmo de la Torá y Shas.

El rival de Netanyahu y presidente de Hosen LeIsrael, Benny Gantz, se unió a las críticas contra el primer ministro. “La inusual respuesta de AIPAC, una organización que no trata de manera rutinaria con la política interna israelí, demuestra que Benjamín Netanyahu nuevamente cruzó las líneas éticas para mantenerse en el poder, mientras que daña el carácter de Israel, la moral judía y nuestras importantes relaciones con la judería estadounidense”

Itzik Shmuli, miembro del Partido Laborista, dijo en respuesta a los comentarios del primer ministro: “Todo israelí debería agradecer a AIPAC y CJA por su postura firme y decidida contra la abominable alianza de Netanyahu con los kahanistas”.

“Netanyahu debe saber que no todo lo que sirve a su supervivencia política y legal es aprobado, ciertamente no acciones que contradicen nuestro interés nacional como Estado”.

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