Enlace Judío México e Israel – La terraza de las instalaciones de Yad Lakalá, decorada para la ocasión en blanco y negro con elegantes centros de mesa morados y lila, lucía espectacular. Así lo atestiguaron las aproximadamente 120 personas que la noche del 5 de marzo acudieron al lugar a festejar que hace 32 años nació Yad Lakalá, una iniciativa de varias mujeres voluntarias judeomexicanas que ayudan a las novias de la comunidad a verse como reinas el día de su boda. 

Los vestidos de novia que regalan en Yad Lakalá son prácticamente nuevos. Han sido usados una vez y las
novias lo lavan y donan a la institución. También amueblan las casas con todo lo necesario, desde utensilios de cocina, blancos, muebles y más.

Yad Lakalá cuenta también con siete departamentos que renta a precios muy razonables. Esta
organización nació bajo la ayuda de la Comunidad Maguén David, aunque actualmente las personas de
cualquier comunidad pueden recurrir a sus servicios. Durante los 32 años de existencia
de Yad Lakalá se han ayudado a mil 200 novias.

Para comenzar el evento tomó la palabra Salomón Cherem, presidente de la Comunidad Maguén
David quien recordó las ocasiones en que ha trabajado con la institución,  “Tantos años, tanto esfuerzo, tanta creatividad (…) la creatividad que tiene Yad Lakalá, nos quitamos el sombrero. Yad Lakalá es el modelo de lo que ejemplifica el judaísmo, el jesed (bondad), la armonía, la belleza. Ha sido un comité que ha trabajado arduamente por el bienestar de nuestra comunidad.”

Por su parte Alegre Zaga, presidenta de Yad Lakalá, dijo que “todos se preguntarán cuál es la razón de este festejo? ¿Por qué en especial el 32 de Yad Lakalá? El número 32 representa la palabra lev (corazón). Precisamente nuestras voluntarias son el corazón de Yad Lakalá. Sin ustedes la institución dejaría de latir. Por eso hoy festejamos con el corazón a quien es nuestro corazón.” Respecto a la fecha para la realización del evento, Zaga aclaró que tampoco es una coincidencia: “es justo el mes de Adar, el mes de la alegría. Nuestra misión es alegrar los corazones de las novias y hacer realidad sus sueños.”

Al dirigirse a las voluntarias que dan su esfuerzo y creatividad para cumplir la misión de Yad Lakalá, Zaga dijo: “son ustedes las que ayudan a cada novia a emprender su vuelo. Quiero agradecerle a todas ustedes, y a ustedes, señores que comparten ese valioso tiempo y pensamiento de sus esposas con Yad Lakalá.”

El rabino Mordejai Tussie, consejero y líder espiritual de Yad Lakalá, recordó que “muchas veces el motor de la casa está en la casa y no se nota. Cuando compramos un coche no vemos el motor. El coche vale
por su motor. Eso son ustedes, mujeres de Yad Lakalá. Hacen que sus casas funcionen.” También aludió al corazón:  “estamos reunidos por el lev que ustedes tienen. Aquí, señores, no se piensa en las novias como si fuera una persona ajena, una persona más. Cuando se preocupan por otras personas como si fueran sus
propias hijas. Ahí es donde Bore Holám deposita milagros. Si hoy necesitamos una llave para educar a nuestros hijos, la mejor llave es cuando nosotros estamos pensando en los otros.”

La noche sirvió para reconocer la labor de las voluntarias, así que todas ellas recibieron un regalo que les fue entregado por representantes de la institución, mientras que varias niñas les daban una rosa a cada una, como símbolo de gratitud y reconocimiento por su trabajo, por dejar su esfuerzo y su lev en el servicio a su comunidad. Más tarde se sirvió la cena, en un ambiente que jamás dejó de ser de alegría y emoción.

 

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