Enlace Judío México e Israel – Este jueves 14 de marzo se llevó a cabo la magna conferencia de la doctora Edith Eva Eger, sobreviviente del Holocausto, en el salón principal de la Comunidad Sefaradí. La bienvenida estuvo a cargo de David Sarfati, presidente de la Comunidad Sefaradí, quien agradeció a Eger que aceptara dar la conferencia que, dijo, era un gran honor y privilegio para todos los asistentes.

La Dra. Eger fue superviviente de los campos de concentración Auschwitz-Birkenau, Mauthausen
y de la “marcha de la muerte”, superando los tratos inhumanos de los nazis. Hace siete décadas, la vida de la Dra. Eva Eger pasó de la normalidad en la que vivía como una adolescente en su pueblo natal de Hungría, llena de alegría, familia, amor, arte, deporte e ilusiones a una anormalidad impuesta por el régimen nazi.

La Dra. Eger contó que sobrevivió a los tratos inhumanos por suerte, actitud, fortaleza de espíritu y el amor fraterno de su hermana Magda, con quién compartió esta cruel experiencia. Cada día vive para construir un mundo mejor y luchar por la felicidad que el imperio nazi le robo a ella.

“La mejor venganza contra Hitler es que mi libro se tradujera al Alemán y se esté vendiendo en el centro de Frankfurt”, dijo en esta conferencia, donde relata lo terrible que fue ese periodo de su vida e invocó un mantra que la mantuvo con vida entonces: “si sobrevivo el día de hoy sobreviviré mañana” y como premio a
su valor y ganas de vivir, después de la guerra se trasladó a Checoslovaquia, en donde conoció al
hombre con quien se casaría, y que en 1949 se iría con ella a vivir a Estados Unidos.

En el año de 1969 se tituló en Psicología por la Universidad de Texas; actualmente se dedica a la psicología clínica, ayudando a las personas a descartar sus limitaciones y a lograr cosas que creían inalcanzables.

Su libro The Choice (La elección) ganó el National Jewish Book Award en 2017, un premio otorgado por el Jewish Book Council desde 1950.

La Dra. Eger pidió a las nuevas generaciones a que no se limiten a lidiar con lo que reciben si no que
siempre duden y elijan pero sobre todo, que cuestionen, que no acepten la autoridad ciegamente, porque de otra forma se acabaría la democracia.

Al finalizar la conferencia el público se puso de pie para ovacionar a la Dra. Eger.

 

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