Enlace Judío México e Israel.- El pintor expresionista alemán fue visto una vez como víctima del arte de Hitler, pero un nuevo espectáculo en Berlín reveló que era un entusiasta partidario nazi.
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La decisión de la canciller Angela Merkel de retirar dos pinturas de Emil Nolde de las paredes de su oficina ha desatado un acalorado debate alemán cuando una exposición sobre el pintor expresionista y sus vínculos con los nazis que se inauguraron en Berlín.
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Los organizadores del espectáculo “Emil Nolde, una leyenda alemana: el artista durante el nacionalsocialismo“, le habían pedido a Merkel una de las dos pinturas que se le habían prestado.
Pero decidió enviar ambas: una pintura de flores de 1915 en un jardín y la obra de 1936 “Breakers”, dijo su portavoz Steffen Seibert.
No se dio ninguna explicación para la decisión. Tampoco se ofreció una razón oficial por la cual Merkel no quiso que regresaran cuando la exposición se cierre en septiembre.
Pero la medida fue rápidamente interpretada por los medios alemanes como un rechazo tardío por parte de Merkel del artista por sus opiniones antisemitas y su enredo con el régimen nazi de Adolf Hitler.
En medio de la controversia, Seibert dijo que la Fundación del Patrimonio Cultural Prusiano ofreció a Merkel otras dos pinturas.
Pero después de que los historiadores señalaron rápidamente que el artista en cuestión, Karl Schmidt-Rottluff, también era conocido por sus comentarios antisemitas, Merkel simplemente decidió posponer la decoración por un tiempo.
“La canciller decidió no tomar prestados otros cuadros de la Fundación del Patrimonio Cultural Prusiano para su oficina“, dijo un portavoz.
El episodio ha desencadenado una serie de búsquedas de conciencia sobre qué tipo de lugar deben tener los valores morales de un artista en la forma en que se ven o se representan sus obras.
“Reacción de pánico”
Nolde fue elegido durante mucho tiempo en la posguerra como víctima del régimen de Hitler porque su arte fue condenado por los nazis como “degenerado” y retirado de los museos.
Pero la investigación ha demostrado que era un feroz antisemita y ferviente partidario del Tercer Reich.
En la exposición de las obras de Nolde que se inauguró el jueves en el museo Hamburger Bahnhof de Berlín, las curadoras Aya Soika y Bernhard Fulda trataron de disipar los mitos que rodeaban a la persona de Nolde, mostrando sus puntos de vista antijudíos y sus obras.
Fulda admitió que estaba “ligeramente sorprendido” por la decisión de Merkel de devolver las dos pinturas.
“Hay una forma de usar el complejo y difícil pasado alemán y, sin duda, negativo, para decir ‘todavía es relevante hoy, y no estamos mirando hacia otro lado’“, dijo.
Pero reconoció que tal análisis podría no ser una prioridad para un líder que está luchando contra las crisis globales en múltiples frentes.
El escritor Florian Illies, en el semanario Die Zeit, también dijo que sería más productivo “dar espacio a la verdad, que las personas malintencionadas también pueden hacer buen arte“.
“Es por supuesto incómodo. Pero mucho más valiente que empezar de nuevo a remover pinturas de las paredes”.
Thole Rotermund, tesorera de la federación alemana de galerías y comerciantes de arte, dijo a la agencia de noticias DPA que Merkel debería dar una explicación clara de su decisión.
Si Nolde está siendo rechazado por sus opiniones políticas, “entonces ella ya no debería estar sentada en la primera fila” en el festival de ópera de Bayreuth al que Merkel asiste anualmente y que presenta las obras del notorio antisemita Richard Wagner.
Para Christian Ring, el director de la Fundación Seebuell Ada y Emil Nolde, el debate que surgió sobre el artista “es muy, muy emocionante“.
“Creo que es correcto que la gente esté hablando de eso, y que esté analizando la situación y discutiéndola.
“Eso es algo que me parece más importante que lo que se ha eliminado de las paredes o no se ha eliminado. Y eso es lo que estamos tratando de hacer con esta exposición: queremos una discusión, cómo debemos navegar en esto en relación con nuestra brújula moral“, dijo.
La oficina de Merkel también “debe desarrollar su propia opinión sobre qué arte debe presentarse en la cancillería“, dijo.
Sin embargo, una cosa era segura: la decisión de Merkel pasaría a la historia como una “anécdota para mostrar cómo después de tantos años, … Hitler … todavía genera tanto interés que es difícil de ignorar“, predijo Fulda.
“Y es por eso que se tiene esta reacción de pánico“.
Fuente: The Times of Israel – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico
