Enlace Judío México e Israel – El presidente de Israel, Reuven Rivlin inició hoy las consultas para decidir a quién asignar la formación del próximo gobierno y dijo a representantes del partido Likud que “el pueblo quiere unidad”. Destacó que el partido de derecha debe desempeñar un papel clave para salvar las divisiones en la sociedad israelí, independientemente quien será el próximo primer ministro.

RAOUL WOOTLIFF

Rivlin también consultó con los representantes de Kajol Laván sobre si considerarían la posibilidad de unirse a un gobierno no liderado por su líder del partido, Benny Gantz, una opción que el partido descartó firmemente.

Parece seguro que Rivlin asignará la formación del gobierno al primer ministro Benjamín Netanyahu, quien probablemente podrá formar una coalición de 65 escaños con el Likud (36 asientos), los partidos ultra-ortodoxos de Shas y Judaísmo de la Torá, que juntos obtuvieron 15 escaños, la Unión de Partidos de la Derecha (5), Kulanu (4) y, tal vez, Israel Beitenu (5).

Por lo contrario, Kajol Laván de Benny Gantz descartó la posibilidad de asociarse con los dos partidos árabes israelíes, Ra’am-Balad y Ta’al-Hadash, por lo que sólo puede contar con el apoyo del partido Laborista y Meretz a pesar de haber obtenido 35 escaños. Aunque los resultados lo ubican justo detrás del Likud, con el respaldo de los partidos de centro-izquierda y de izquierda no alcanzaría a formar una coalición y llegaría a a sólo 45 asientos.

Después de una campaña electoral en la que el Likud acusó a Rivlin de planear “subvertir la voluntad del pueblo” al elegir a un candidato distinto a Netanyahu para liderar el próximo gobierno, el presidente inició las consultas destacando a los representantes principales del partido que su papel es el de un emisario del pueblo.

“Dije antes de las elecciones y repito ahora: un presidente no elige a un primer ministro, ninguna persona entre los ciudadanos del país elige un primer ministro, sólo el soberano elige un primer ministro y el soberano es el pueblo”, dijo a los ministros del Likud, Yariv Levin y Miri Regev, y al ex presidente de la coalición, David Bitan, que representan al partido en las consultas.

Después de que el presidente haya hecho la elección de a quien encargar la formación del gobierno, quien, como dijo Rivlin, no necesariamente tiene que haber recibido la mayoría de las recomendaciones o ser el líder del partido más grande, el designado tendrá 28 días para formar la coalición gobernante, con la posibilidad de extender el plazo a discreción del presidente.

Como era de esperar, el ministro de Turismo, Levin, dijo a Rivlin que el partido Likud “desea recomendar a Benjamín Netanyahu, como la persona que ganó la más amplia confianza y el apoyo público, para formar el próximo gobierno”.

Levin agregó que “hemos terminado una campaña electoral difícil y nos disponemos a formar un gobierno estable que podría liderar al país por cuatro años más”.

Por primera vez, las consultas se transmitieron en vivo, una decisión que la oficina del presidente anunció la semana pasada “en nombre de la transparencia” y “en una decisión histórica y pionera”.

Después de escuchar de los representantes del Likud, Rivlin dijo que el partido debe considerar su papel en la unión del pueblo, lo que podría indicar su preferencia por la formación de un gobierno de unidad nacional.

“Todo el pueblo quiere ver una unidad más valiente, incluso cuando hay desacuerdos entre la gente”, dijo Rivlin.

Foto: Ronen Zvulun y Jack Guez/AFP

Rivlin también preguntó a los representantes del Likud qué harían si el primer ministro no recibe al menos 61 recomendaciones para formar la coalición.

Levin respondió que pensó que el presidente tomaría en consideración “el hecho de que el Likud obtuvo más votos, más escaños y más recomendaciones, aunque no sea la mayoría”.

Refiriéndose a los cargos por corrupción contra Netanyahu, en espera a una audiencia, la ministra de Cultura, Miri Regev, dijo que el pueblo dejó en claro que prefiere al primer ministro.

“El primer ministro recibió la confianza del público a nivel personal, y el Likud obtuvo 36 asientos por primera vez en muchos años … Esto significa que el público habla con claridad”, dijo Regev.

Se especula que Netanyahu podría usar su nueva fuerza política para promover una legislación de inmunidad contra acciones de índole penal, mientras siga siendo primer ministro. Se ha informado que está considerando condicionar la entrada a su nuevo gobierno con el apoyo a la llamada Ley Francesa que protege a un primer ministro en funciones de ser procesado o alterar las leyes de inmunidad parlamentaria para protegerlo automáticamente de los cargos. También podría utilizar la ley de inmunidad existente, pidiéndole a sus colegas que le otorguen inmunidad sobre la base de una acusación aparentemente de mala fe, por lo que necesitaría una mayoría simple en el Comité de la Knéset y luego nuevamente en el pleno del parlamento.

Rivlin luego recibió a los representantes de Kajol Laván, quienes, como era de esperar, también recomendaron a su presidente Benny Gantz como primer ministro.

El presidente observó que “estas elecciones fueron tormentosas, que en muchas ocasiones perforaron los corazones de muchos de muchos de los ciudadanos del Estado de Israel”, y dijo que “muchas personas en Israel quieren ver una intento de acercamiento”.

“No quiero usar la palabra unidad en el sentido político, estoy hablando de unidad entre la gente – pero quieren vernos a todos trabajando juntos como una sola persona”.

El exjefe del Estado Mayor de las FDI, Gabi Ashkenazi, nuevo diputado electo y número tres en la lista de Kajol Laván dijo a Rivlin que el partido centrista pretende liderar un proceso de reconciliación.

Los miembros del partido Kajol Laván se reúnen con el presidente Reuven Rivlin en la Residencia del Presidente en Jerusalén el 15 de abril de 2019 (Yonatan Sindel / Flash90)

“Este fue un ciclo electoral realmente tormentoso, pero el pueblo soberano expresó su voluntad. Respetamos los resultados de las elecciones y la decisión del presidente.

Citando “los grandes desafíos que enfrenta el país”, Rivlin preguntó a los representantes de Kajol Laván si estarían dispuestos a sentarse en un gobierno “no encabezado por la persona que ustedes recomiendan”, una clara referencia a Netanyahu.

“No nos sorprende que esté haciendo esa pregunta. Y lo hemos considerado, pero hemos decidido que, debido a las consideraciones políticas y de otro tipo, no podríamos unirnos a tal gobierno”, respondió Ashkenazi.

Durante la campaña electoral, los líderes de Kajol Laván aseguraron que no formarán parte de ningún gobierno encabezado por Netanyahu, pero considerarían unirse al Likud en un gobierno encabezado por otra persona.

Durante las consultas, los representantes de los partidos ultraortodoxos Shas y Judaísmo de la Torá recomendaron a Netanyahu como primer ministro.

Los representantes de Hadash-Ta’al fueron los últimos en reunirse con Rivlin el lunes. Mañana martes, el presidente realizará consultas con miembros del Partido Laborista, Israel Beitenu, la Unión de Partidos de Derecha, Meretz, Kulanu y Ra’am-Balad.

Rivlin anunciará su decisión después de que el Comité Central Electoral transfiera los resultados oficiales y finales de las elecciones.

Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico