Enlace Judío México e Israel – Después del asesinato masivo de judíos a manos de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, la organización Yad Vashem emprendió el proyecto de encontrar a lo que fue nombrado como “Justos entre las Naciones”, es decir, a aquellas personas que arriesgaron su vida por ayudar a salvar la vida de un judío.

Los testimonios comenzaron a surgir, así que Yad Vashem estipuló que, para que una persona fuera considerada “Justa entre las Naciones”, tenía que cumplir con 3 requisitos:

-No debía ser judío.

-Debió haber ofrecido ayuda sin recibir a cambio ningún tipo de compensación ni remuneración económica.

-La ayuda brindada debió significar (para el que ayudó) arriesgar la vida o la libertad.

Miles de judíos no dudaron en buscar a sus salvadores, así que caso por caso fue revisado y verificado, de este modo los justos entre las naciones comenzaron a ser reconocidos y honrados. Poco a poco, el número de justos se fue incrementando año con año, en mayo del 2017 se contabilizaron a 26,00 justos entre las naciones.

Mencionar nombres sería injusto pues la lista de personas es bastante extensa: Se trata de enfermeras, profesores, diplomáticos, se trata de padres o madres de familia comunes y ordinarios, se trata de monjas o de miembros de la resistencia, de gente que con sus acciones de valentía simplemente hizo la diferencia.

Durante todos estos años, el Estado de Israel ha otorgado a cada justo una medalla, un certificado, su nombre en el jardín de los “Justos” en el Museo de Yad Vashem en Jerusalem, la ciudadanía israelí y hasta ayuda económica en caso de ser necesaria. Y es que en pocas palabras, ¿como se paga? ¿Como se paga cuando le debes a alguien la vida? ¿Como se agradece esa inmensa calidad humana?

Hoy, así como cada vez hay menos sobrevivientes del Holocausto hay también menos “Justos entre las Naciones”; sin embargo, aquellas almas nobles serán recordadas y honradas a pesar del paso del tiempo, pues los judíos tienen muy claro que quién salva una vida, salva al mundo entero.