Nadia Cattan para Enlace Judío México e Israel- David Ben Gurión fue el más importante constructor del Estado de Israel, pues antes de la declaración de independencia en 1948, fue él quien dirigió todo lo necesario para que el país se mantenga en pie. David fue profundamente sionista, estaba plenamente convencido de que los judíos necesitaban un Estado propio y a ese sueño le dedicó cada uno de sus días. Sin embargo, el sionismo no involucra forzosamente la fe y ese era el caso de David Ben Gurión.

Prueba de ello es un artículo que estuvo exhibido en la Biblioteca Nacional de Israel. Se trata de una nota que David Ben Gurión escribió al profesor Samuel Hugo Bergmann, un renombrado filósofo y amigo cercano de los grandes escritores Franz Kafka y Martin Buber. Esta nota hablaba sobre las creencias religiosas del padre fundador de Israel.

Después de expresar su respeto por los “creyentes”,  Ben-Gurión escribió en la nota que la historia de la creación descrita en  Génesis no puede ser aceptada como un hecho histórico por el simple hecho de que no había nadie que lo atestiguara. Sin embargo y a pesar de esto, Ben Gurión no rechazaba la idea de la existencia de Dios. Con su puño y letra David explica:

“Rechazo a los ateos. Es imposible pensar en cualquier regla u orden en la naturaleza sin primero asumir que, exterior al hombre, existe un intelecto sublime que no podemos comprender; los intentos de describir esa fuerza, todos son en vano”.

Esta nota causó controversia sobre una de las figuras más importantes del Estado judío, pues para algunos las creencias religiosas del fundador de Israel son algo determinante, mientras que para otros no son trascendentales en lo absoluto.