Enlace Judío México e Israel.- Petra Schöning, representante de la organización de derechos humanos Amnistía Internacional, que también trabaja para la agencia de desarrollo del gobierno alemán GIZ, dio una charla antisemita. El incidente sigue a una serie de incidentes antisemitas en ambas organizaciones.
MARC NEUGROSCHEL
La agencia de desarrollo GIZ confirmó el empleo de Petra Schöning y dijo que “ella ayudaba a preparar a los participantes para misiones en el extranjero“, incluso a Israel.
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El evento de presentación, titulado “Política y vida cotidiana: perspectivas sobre Cisjordania y Gaza“, fue presentado recientemente por la Academia Episcopal en la ciudad alemana de Aquisgrán, donde Schöning es una presentadora habitual.
Durante su conferencia, Schöning hizo varias declaraciones falsas diseñadas para demonizar al Estado de Israel de una manera antisemita. Entre otras cosas, dijo que “Israel no es una democracia“. La audiencia respondió a la charla durante las preguntas y respuestas, cuestionando el derecho de Israel a existir y expresando su apoyo al movimiento de boicot, desinversión y sanciones. Schöning respondió aprobando estos comentarios.
Otra afirmación descaradamente falsa que hizo fue que el ministro de cultura de Israel prohibió la lectura de un libro por un escritor israelí sobre un romance entre una mujer israelí y un hombre palestino. La novela, Todos los ríos de Dorit Rabinyan, fue excluida del currículo de las escuelas secundarias israelíes en 2015. Sin embargo, nunca fue prohibida ni censurada en Israel, y el público israelí siempre ha sido libre de comprar, leer y discutir el libro.
Schöning afirmó que los soldados israelíes “ejecutan” a los participantes palestinos pacíficos durante sus protestas semanales de “Marcha de retorno” en la frontera entre Israel y Gaza.
Desde marzo de 2018, varios manifestantes han llevado a cabo ataques violentos contra soldados israelíes en la frontera. Cientos de globos incendiarios y otros dispositivos han sido enviados desde Gaza a Israel, causando grandes incendios y grandes daños en los campos y el peligro para las personas que viven en el sur de Israel.
Schöning también tergiversó el encarcelamiento de terroristas palestinos condenándolos como encarcelamiento arbitrario, y la intercepción por parte de Israel de recompensas financieras a sus familias como acoso de mala fe.
Finalmente, culpó al conflicto israelí-palestino de la reciente afluencia de refugiados a Europa.
Elisabeth Paul, miembro del Consejo Regional del Gran Área de Aachen para el Partido Verde, criticó la intervención de Schöning como “desinformación y propaganda antisemita“.
Monika Schwarz-Friesel, una importante investigadora alemana de antisemitismo, confirmó ese sentimiento.
“Hoy en día, los comentarios obsesivos contra el Estado de Israel representan la forma más generalizada de expresar el odio a los judíos“, dijo Schwarz-Friesel. “Camuflando sus declaraciones como crítica política y preocupación humanitaria, los antisemitas contemporáneos difunden declaraciones como que Israel no es una democracia; Israel usa fuerza desproporcionada; el boicot de Israel es bienvenido; y acusan a Israel de delitos imaginarios.
“Sin ninguna justificación razonable, se culpa al Estado de Israel por todo tipo de problemas en el mundo, y su derecho a existir como estado judío es rechazado“, dijo.
Schöning dijo que prepara a los estudiantes que van a viajes escolares a Israel y que participan en proyectos de intercambio alemán-israelí y alemán-árabe. También trabaja como freelancer para GIZ.
GIZ es un esfuerzo federal que trabaja con organizaciones como la Academia para la Cooperación Internacional (AIZ) para fomentar el aprendizaje mutuo y la creación de redes. Cuenta con cuatro oficinas regionales.
En sus propias palabras, ella “entrena a especialistas enviados por el gobierno alemán a Israel y los territorios palestinos“.
Un portavoz de GIZ confirmó que el nombramiento más reciente de Schöning por AIZ, propiedad de la agencia, data de mayo, cuando “ella ayudó a preparar a los participantes para misiones en el extranjero“.
GIZ ha estado involucrado en varios escándalos antisemitas. En mayo pasado, el tabloide alemán Bild informó sobre varios casos de la GIZ que cooperó con organizaciones palestinas que abogan por la destrucción del estado judío. En marzo de 2018, la ONG vigilante de Jerusalén, Monitor, publicó una exposición sobre declaraciones antisemitas de empleados de la GIZ, algunas de las cuales se distribuyeron en las redes sociales.
Cuando se le preguntó sobre estos incidentes, la portavoz de GIZ respondió que su organización “no tolera el antisemitismo y toma medidas decisivas contra ella” y no confirmó si los empleados mencionados en el informe de la ONG Monitor todavía están trabajando para la agencia.
Cuando se le preguntó si GIZ tiene intención de tomar medidas contra Schöning, ella respondió que “los participantes evalúan los programas de manera rutinaria. No ha habido quejas contra la Sra. Schöning”.
Schöning también sirve como portavoz de la filial alemana de Amnistía Internacional, representando a su grupo de coordinación para Israel y los territorios palestinos. Esa organización de derechos humanos también ha estado involucrada en una larga lista de incidentes antisemitas. Una conferencia diseñada para conectar las campañas de BDS en el Reino Unido con las de Israel y los territorios palestinos se realizó en la sede de Amnistía en Londres en 2016, algo que fue expuesto en ese momento por la ONG Monitor.
En 2015, la asamblea general de Amnistía Internacional en el Reino Unido rechazó una moción para ejecutar una campaña contra el antisemitismo.
Un portavoz de Amnistía dijo que Schöning no representa a su organización cuando se presenta en Aachen. La Academia Episcopal de Aquisgrán, que había organizado la charla de Schöning, también se negó a retractarse de los comentarios de su presentador. En cambio, el director de la academia, el Dr. Christiane Bongartz, escribió que llamar antisemita a la conversación de Schöning sería una distorsión.
Varias preguntas a la Sra. Schöning permanecieron sin respuesta.
Fuente: The Jerusalem Post / Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudío
