El kirchnerismo está de vuelta en Argentina. Miguel Steuerman nos habla al respecto

Enlace Judío México e Israel – Ante el inminente regreso del kirchnerismo al gobierno de Argentina, la comunidad judía de aquel país ha encendido las alertas. Para entender más sobre el tema, conversamos con Miguel Steuermann, director de Radio Jai.

Parece que viene una nueva crisis en Argentina…

La verdad es que, como sabes, estamos atravesando nuevamente una crisis, en un país cíclico en crisis, que nadie puede determinar cómo va a resolverse pero, bueno, también esto pasará en algún momento, más allá de que cada una de estas crisis profundas siempre dañan y mucho, sobre todo a los más vulnerables y además, bueno, con todo lo que ella acarrea en sus diversas lecturas.

¿Qué fue lo que ocurrió en el proceso electoral reciente?

Bueno las PASO debían ser una elección interna de los partidos, no lo ha sido y lo que ha sido es casi una encuesta de la preferencia electoral que ha dado un resultado de una contundencia enorme, y que casi podríamos decir ya han definido lo que va a ser la elección del 27 de octubre.

El regreso del kirchnerismo

Lo que ha aparecido en las PASO es virtualmente que ganarían incluso en primera vuelta. La fórmula Fernández-Fernández sacó un 47% de las preferencias y se requiere nada más que un 45% para llegar a la Presidencia. Es casi una definición, y eso ha traído toda una crisis de los mercados, interna, bueno, todo lo que estamos viendo.

¿Cómo pasó eso?

Para algunos era impensable el retorno de Cristina Kirchner y el kirchnerismo, después de todos los escándalos enormes de corrupción que hemos conocido, y después de todo lo que se vio en esos 12 años, sobre todo los últimos años de la presidencia de Cristina Kirchner, pero (…) es casi una fe religiosa o, para ponerlo en términos futbolísticos, es la pasión por un club que hace que la gente responda desde la pasión mucho más que sobre otro tipo de factores, y acá el peronismo tiene, yo diría, una ideología única, que es la ideología del poder.

Son grupos que tienen por esencia el dominio del poder y esto va más allá de la ideología porque, en realidad, si uno mira el peronismo hoy, y en la historia, peronista ha sido Menem, fue un liberal desde el punto de vista de la política económica, peronista ha sido Néstor Kirchner; Cristina Kirschner; hoy, Fernández… todos son peronistas más allá de la ideología.

Y Macri en realidad mantuvo su caudal electoral, el 32% que de hecho tuvo, es más menos lo que de la población de la sociedad argentina responde a ese tipo de mirada republicana, donde el respeto de la norma, donde hay, diría, una búsqueda de una sociedad más europea en términos de las formas, frente a una gran masa popular, el peronismo, que se unificó nuevamente y que, a partir de eso, ha logrado este resultado electoral.

¿Qué implica eso para la comunidad judía?

Creo que para la comunidad judía puede significar, como tantas veces, otra vez un momento difícil, también estamos acostumbrados, en realidad, mi temor personal es que ciertos grupos dentro del kirchnerismo, muy cercanos a ideologías fundamentalistas, muy antiamericanistas, antiisraelís por lo tanto, engloban a todos en un conjunto, y pueden muchos que se sintieron afectados por el gobierno de Macri, por un intento de ordenar incluso judicialmente situaciones muy difíciles, quieran venir por revanchas, y digo esto en términos de miembros de la comunidad judía que están muy cercanos al kirchnerismo, que han sido partícipes del mismo y que pueden llegar a querer a venir por alguna revancha; entonces, puede ser un momento muy delicado.

La comunidad judía siempre está expuesta, ese es nuestro Karma, lo voy a decir así, por vivir en la diáspora, siempre estamos expuestos a situaciones que nos exceden, y somos muy útiles para cualquier coyuntura. Yo creo que Alberto Fernández es un pragmático, no creo que caiga en excesos pero hay que ver cómo va a poder controlar, sobre todo, a los extremistas que también conforman filas dentro de ese espacio peronista.

¿De qué tipo de revancha estamos hablando? ¿Qué puede pasar?

Puede pasar de todo. Puede pasar que un personaje como D’Elía, que hoy está encarcelado y que fue uno de los artífices del memorándum con Irán, sabidamente un antisemita junto con otros que también han participado de lo que fue ese acuerdo espurio, quieran ocupar espacios de poder y vengan por revanchas de diversos tintes.

Uno no puede saber exactamente de dónde puede venir, y como digo, incluso de judíos que han participado dentro del kirchnerismo, y que conocen muy bien los resortes de la comunidad.

El exdirector ejecutivo de la DAIA, Jorge Elbaum, cuando dejó la DAIA, pasó a ser uno de los más cercanos a Cristina Kirchner y a toda esa ideología, y fue y sigue siendo uno de los artífices para golpear a las instituciones judías, tanto la DAIA, la AMIA, como todo lo que es la comunidad. Hay distintos personajes que están ahí, cercanos, y que pueden querer reivindicarse luego de cuatro años donde estuvieron, de alguna manera, muy golpeados en términos de su credibilidad y en términos de lo que pasó en la Argentina en todo el último periodo de los Kirschner.

En las redes hay un pedido de auxilio:

Yo creo que los pueblos son desmemoriados, puedes agregarle ahí (a la lista) ‘asesinato de Nisman’. Yo creo que la última etapa del gobierno de Cristina Kirchner, que hizo un giro de 180 grados de lo que había sido el gobierno de su fallecido marido, en todos los aspectos y también en estos temas, fue de los que recuerdo el gobierno más antisemita en términos, yo casi lo diría, de un pogrom de antisemitismo que se vivió, con declaraciones que algunos vivimos de “traidores a la patria”, “operadores de los fondos buitres de los Estados Unidos”, etc., y con personajes que estuvieron operando para Irán y todo lo que tenga que ver en contra del “imperio” y “del mal”, y del “Satanás de este mundo”… Estados Unidos, Israel y los judíos. Estamos ahí siempre.

Ahora, no creo que esto esté en la primera agenda del gobierno que va a entrar. Pueden surgir hechos complejos pero creo que también hay contrapesos internos que siempre los hay de gente sensata, Alberto Fernández nadie puede decir que sea un hombre que tenga alguna tendencia antisemita, incluso te diría que más allá de las particularidades de Cristina Kirchner, esto tuvo más que ver con intereses geopolíticos, negocios, Venezuela y su vínculo con la Argentina, los préstamos y otras cosas más, que con genuinamente una agenda propia.

Y hoy Venezuela está como está, sabemos de la tragedia que ellos viven, no creo que sea hoy un socio activo para Argentina, más allá de lo que pueda pasar en los vínculos internacionales y cómo se reposicione en términos de la negociación con el Fondo Monetario y con el mundo, hoy Venezuela no es un aliado factible, no tiene nada para dar y por el contrario… y tendrá Alberto Fernández que ver cómo se va a posicionar en términos políticos. Yo quiero creer que va a haber moderación, y esto no significa que para la comunidad no sea un momento complejo, y sobre todo pensando en que cada vez que hay una profunda crisis y una profunda crisis económica y social que no se va a resolver con esta elección, se ha agudizado, bueno, los judíos siempre estamos como una posibilidad de encontrar un chivo expiatorio a situaciones que son de otras magnitudes.

¿Qué va a pasar con el tema de la justicia a la AMIA y por Nisman?

Voy a superar la pregunta diciendo qué va a pasar con la justicia. Una de las cosas que va a pasar es que todo va a quedar en la impunidad absoluta. Incluso lo que se ha juzgado, algunos funcionarios encarcelados, se habló mucho durante los últimos meses, que son presos políticos, cuando los elementos judiciales son enormes, seguramente van a ser liberados. No tengo casi duda de De Vido y Milagro Sala y algunos personajes del kirchnerismo van a ser liberados. La justicia está siempre maniatada por la política. Respecto del atentado (contra la AMIA), la causa ha sido usada permanentemente, ya tiene más de 25 años. Algo que no se esclareció y se hizo tanto para encubrir durante 25 años va a seguir siendo simplemente un elemento a usar en los momentos propicios. Sobre el asesinato de Nisman, que ya tiene cuatro años y está en la absoluta impunidad, seguramente va a continuar de la misma manera.

¿Estás preocupado por ti, por tu persona?

No estoy preocupado por mi persona. Pasé muchas cosas y la vida es lo que es. Nunca ha sido tranquila en ningún lugar. También puedo hoy decir que vivir en New Jersey puede ser, siendo judío, un tema para estar preocupado. O en Jerusalén, que hace un par de minutos desgraciadamente acuchillaron a alguien nuevamente… El mundo en general no es un mundo tranquilo. Y si además somos judíos tenemos que tener siempre un poquito más de preocupación en el sentido que nos tocan situaciones difíciles de confrontar (…) Estamos acostumbrados, sobrevivimos, somos un pueblo de sobrevivientes.