Enlace Judío México e Israel – Un legislador iraní de alto rango culpó el miércoles a Israel, EE.UU. y Arabia Saudita de un presunto ataque contra un petrolero la semana pasada frente a la costa saudita y dijo que presentaría la queja ante la ONU.
Teherán dice que el petrolero Sabiti con bandera iraní fue alcanzado por dos explosiones separadas en el puerto de la ciudad saudí de Jeda en el Mar Rojo el viernes, informó el sitio The Times of Israel.
“Las filmaciones que las cámaras montadas en el petrolero han demostrado que EE.UU., el régimen sionista y Al-Saud llevaron a cabo el ataque”, dijo el diputado Abolfazl Hassan Beigi, citado por la agencia de noticias Fars.
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Hassan Beigi, miembro de la comisión de seguridad nacional y política exterior del parlamento iraní, afirmó sin pruebas de que EE.UU., Israel y Arabia Saudita alegaban que ISIS o los talibanes de Afganistán estaban detrás de las explosiones en el Mar Rojo.
También afirmó que Irán estaba en posesión de documentos que apuntaban a la participación de “ciertos gobiernos” en el incidente.
“Existen abundantes documentos y evidencia de interferencia de ciertos gobiernos en el ataque contra el petrolero iraní y serán presentados ante la ONU y el Consejo de Seguridad de la ONU y los países que jugaron un papel en el ataque terrorista deberían pagar el precio de sus acciones”, dijo.
También el miércoles, Ali Shamjani, secretario del Consejo de Seguridad Nacional de Irán, advirtió que habría una “respuesta severa” para quien estuvo detrás de las explosiones.
Si se confirma, el Sabiti sería el primer barco iraní en sufrir parte de una serie de ataques contra buques en el Golfo que Washington culpó a Teherán.
La Compañía de Buques Nacional Iraní publicó el lunes imágenes que muestran dos agujeros en el casco del buque tanque. Los agujeros estaban por encima de la línea de flotación en el lado de estribor del barco.
Las explosiones hicieron que el petróleo se derramara del buque tanque hacia el Mar Rojo, dijo la Compañía, antes de que finalmente se controlara y el barco comenzara lentamente a regresar hacia las aguas del Golfo.
El incidente sigue una serie de ataques inexplicables en mayo y junio contra el envío dentro y alrededor del Golfo, una vía fluvial vital que conecta a los países productores de petróleo con los mercados mundiales, así como ataques de aviones no tripulados en instalaciones petroleras sauditas.
Washington acusó a Teherán de atacar a los buques con minas y de estar detrás del asalto con aeronaves no tripulados, algo que negó rotundamente.
Irán dijo que el ataque “cobarde” en su propio petrolero fue causado por un ataque con misiles y prometió no dejarlo sin respuesta.
Pero la Compañía de propiedad estatal negó los informes de que el ataque se había originado en suelo saudí.
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