Enlace Judío México e Israel.- El judaísmo es una cultura cambiante que se adapta en forma creativa a los desafíos que se le presentan, por ello ha logrado subsistir a través del tiempo. En un breve recorrido histórico por los aportes de la Edad Media trataré de identificar algunos aspectos que actualmente conservamos.
MARGARETH MICHAN
La organización política de la Kehilá se originó en la Edad Media, fue el mecanismo que encontraron los judíos para conservar su identidad siendo una minoría dentro de una sociedad mayoritaria y dominante como era la cristiana o musulmana.
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En Europa cristiana las sociedades se organizaban en gremios, que eran grupos de personas con un mismo oficio para regular la actividad laboral, estableciendo estrictas jerarquías dentro de la sociedad teniendo además un carácter religioso. Las comunidades judías no pertenecían a esta organización social, eran una especie de gremio aparte que podían tener autonomía a cambio de un impuesto que pagaban al señor feudal o al gobernador. Mientras que en las sociedades musulmanas eran minorías llamadas dhmis que se les permitía vivir con autonomía a cambio de la yizia (impuesto). Las kehitot contaban con toda la infraestructura de una ciudad: viviendas, yeshivot, comida, bet din (juzgado), rabinos, médicos, con poco contacto con el exterior, una gran autonomía comunitaria, muy parecida a la que tenemos en México, obviando varias diferencias.
Fue también en la Edad Media que tomó fuerza el misticismo que en la actualidad tiene un nuevo auge y desarrollo; y en ese periodo surgió la contraparte de la filosofía racionalista judía; ambas corrientes buscaron interactuar con el medio que les rodeaba ya ambas las conservamos en la actualidad.
Otro de los elementos que surgen en la Edad Media y que conservamos hasta hoy son los códigos, resultado del ordenamiento de la Halajá y de la necesidad de continuar con el judaísmo, en este rubro tenemos al Rambam, Rabi Moshe Ben Maimon, con su libro Mishne Torá Jad Yazaka una obra de 14 tomos en la que incluye una explicación clara de todas las mitzvot incluyendo temas de corbanot, escrita en el año 1280. También legamos la obra de Rab. Yaacov Ben Asher, Arbaa Turim, un libro muy claro que simplifica, y agrupa de forma práctica las mitzvot, esta vez sin incluir mitzvot que no podía realizarse como las referentes al Bet Hamikdash, escrito en 1320. Más adelante, pero en el mismo periodo histórico, Rab. Yoseph Caro escribe el Shuljan Aruj, un código halajico práctico que se utiliza hasta el día de hoy.
Es también de la Edad Media que conservamos los piutim integrados en los rezos de las sinagogas.
La historia no pasa en vano, ser judíos del siglo XXI nos da el privilegio de ser herederos de grandes aportaciones y nos permite seguir enriqueciendo lo que otros comenzaron.
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